La iniciativa permite dar una respuesta la necesidad de inclusión socioeconómica de detenidos y liberados.
Se presentó la problemática que enfrentan estas personas y se debatió sobre los principales desafíos a la hora de reinsertarse a la sociedad.
Para el ministro de Justicia bonaerense, Gustavo Ferrari, el encierro no debe representar para los privados de libertad un intervalo entre delitos, en razón de no haber recibido absolutamente nada en la cárcel.
Destacó la política que se lleva adelanta en la provincia a partir de la decisión de la gobernadora María Eugenia Vidal, de avanzar en la posibilidad que salgan con oportunidades laborales y resaltó el aporte invalorable de las ONG y fundaciones para lograr ese objetivo.
En el acto también se dieron a conocer los primeros dos proyectos de gestión asociada que se implementan en la Unidad 54 de Florencio Varela del Servicio Penitenciario Bonaerense y en el Complejo IV de Ezeiza, del Servicio Penitenciario Federal.
Fuente: Ministerio de Justicia de la provincia de Buenos Aires