Vanesa Bulacio tenía 42 años y era madre de cuatro chicos, tres de ellos menores de edad. Fue asesinada por su expareja, quien la interceptó con el auto, la chocó y la apuñaló en reiteradas ocasiones antes de fugarse e intentar suicidarse embistiendo una formación del Tren Roca en Florencio Varela.
Ahora, María, hermana de Vanesa, contó que la mujer había denunciado varias veces a su ex, Antonio Rojas, pero que sólo le dieron una restricción perimetral de 300 metros. “Yo la acompañé a mi hermana a la Fiscalía y escuché cuando le dijeron que no podían darle el botón antipánico porque tenía que llevar una ‘evidencia física’”, relató indignada.
Vanesa trabajaba de moza durante el día y por las noches estudiaba para poder terminar la secundaria. Al momento de ser atacada por Rojas se encontraba con su actual pareja, a quien había conocido poco tiempo atrás.
Según el relato de María, la primer denuncia contra Rojas fue luego de que éste le sacara el celular a Vanesa y la empujara contra un vehículo en la vía pública. En otras ocasiones, aseguró, la perseguía y hostigaba frente a sus compañeros. Hasta llegó a ingresar a la casa de la víctima y amenazarla.
El último sábado, pasadas las 19 horas, en el cruce de Beruti y Estada, Rojas chocó con su camioneta el auto en el que viajaban Vanesa y su actual pareja. Descendió del rodado y la acuchilló en reiteradas oportunidades. La víctima fue llevada a Hospital El Cruce, donde minutos después murió.
El femicida intentó suicidarse embistiendo un tren de la línea Roca en el cruce de Bolivia y Perón, pero sobrevivió. Fue trasladado al hospital Mi Pueblo, donde finalmente lo detuvieron para luego ser trasladado a la Comisaría Tercera de Florencio Varela.