El cuerpo de uno de los pescadores que desaparecieron en las aguas del Río de la Plata el pasado viernes 2 de agosto, apareció 11 kilómetros del lugar donde se había tenido el último registro de su bote.
Se trata de Franco Soria, el adolescente de 17 años, que había salido con Amadeo Martínez, de 38. La intensa búsqueda que se inició el sábado 3, no tuvo resultados hasta este miércoles. La familia de Franco ya reconoció el cuerpo.
Los procedimientos durante estos 12 días incluyeron a más de 20 embarcaciones, entre guardacostas, motos de agua y lanchas particulares, que recorrieron gran parte del Río de la Plata, incluyendo Quilmes.