Según el último registro de la Auditoría General de Asuntos Internos, dependiente del Ministerio de Seguridad, desde enero a julio, la cartera resolvió 300 exoneraciones y cesantías: 81 por abandono de fuerza y unos 219 por diferentes delitos.
Tal como constató DIB, la mayoría de las causas de exoneración de la fuerza estuvieron vinculadas durante los primeros siete meses de este año a casos de corrupción. En total fueron 121 agentes los que se vieron involucrados en delitos como conductas extorsivas, el lucro indebido o manejo irregular de fondos, y la participación en robos y estafas.
Asimismo, el listado detalla que 21 efectivos fueron expulsados por violencia policial. La mayoría de estos se desempeñan en distritos del conurbano bonaerense como Lomas de Zamora, Avellaneda, General San Martín y Tigre; aunque también hay casos de Mar del Plata y Mercedes.
Sin embargo, en el registro oficial de exonerados no figura ninguno de los 13 agentes separados por la Masacre de San Miguel del Monte en la que murieron cuatro jóvenes tras ser perseguidos y baleados por un móvil policial el 21 de mayo de este año.
En la nómina también aparecen unos 10 policías expulsados por “irregularidades funcionales graves en dependencia”. En estos casos entran las “fugas por negligencia”, los incendios en comisarías, los incumplimientos a la hora de recibir denuncias y la omisión de declaraciones juradas. Asimismo, durante este año, hay unos 50 casos en los que no se especifican las causas.
Pero además, en el informe se explicita que en los primeros siete meses de 2019 hubo unas 17 cesantías y exoneraciones por “violencia de género y/o familiar”.
Fuente: Infocielo