De acuerdo a lo previsto, la audiencia se realizará en los tribunales orales de Lomas de Zamora, después de que se postergara en el mes de octubre. La fiscalía la acusa de abusar sexualmente “al menos seis veces” entre los meses de agosto y octubre del 2017 “valiéndose de la inmadurez sexual” y agravada porque tenía a cargo la educación del menor.
Para la Justicia, el abuso sexual se concretó en la casa de la acusada en José Mármol y, por eso, será los tribunales de Lomas de Zamora donde se dirimirán los pormenores de una causa que conmocionó a Florencio Varela, ya que el menor integraba el grupo artístico del ballet Atahualpa, coordinado y dirigido por la acusada y que utilizaba las instalaciones de la Universidad Nacional Arturo Jauretche.
Todo arrancó en marzo del año pasado cuando la madre del menor venía notando una actitud extraña del joven desde hacía varios meses y decidió revisarle el teléfono móvil tomando conocimiento de la conversación.
Al enterarse de la situación, la madre decidió realizar capturas de pantalla de los chats y se las envió a su propio teléfono a modo de prueba del delito. A la mañana siguiente, encaró a su hijo, quien le contó todo. Luego, fue a increpar a Reynoso, quien tras negar el hecho en primera instancia, le confesó: “Me dejé llevar, perdoname”.
Según mencionó la mamá del menor a distintos medios de prensa, Reynoso era muy cercana a su familia: “Era amiga mía. Yo era amiga de su marido. Compartíamos viajes juntos. Íbamos a comer a su casa y ellos venían también a la nuestra. Esta persona le decía a todo el mundo que quería a mi hijo como si fuera propio”, comentó al Diario Popular. Y detalló, también en su cuenta de Facebook, cómo la acusada acordaba encuentros en su hogar.
Conocida la denuncia y la iniciación de la causa, Anabela Reynoso, fue suspendida como trabajadora nodocente de la UNAJ. En tanto, según sus propias redes sociales continúa con la enseñanza de baile en otros ámbitos.
Fuente: Infosur