Un vecino de San Francisco Solano comenzó a ser juzgado ayer acusado de haber abusado sexualmente durante nueve años de la hija de su expareja en la casa que compartían. Un relato crudo fue el de la víctima que brindó pormenores de los hechos que se habrían dado cuando ella tenía entre 6 y 15 años.
“Contundente y estructurado” fue el relato que describió la perito psicologa de la joven en las entrevistas mantenidas en sede judicial y que comprometerían al encartado. José María Spinetti, el sujeto que está sentado en el banquillo de los acusados, se mostró en varios tramos de la declaración de la víctima como contrariado, no pudiendo creer lo que la denunciante relataba ante los jueces del Tribunal Oral 4, Alberto Ojeda, Andrea Calaza y Mario Caputo. Sin embargo la joven relató con detalles los presuntos abusos de los que sufrió durante años: “mi mamá no me creía”, indicó a preguntas del fiscal Claudio Pelayo como de la defensora oficial, Silvia González.
Los hechos se dieron años atrás en una finca de la calle 806 en la localidad quilmeña: “les narre todo a mi padrino y al final ahi me creyeron”. “El nos pegaba constantemente (en relación al imputado)”, puntualizó la mujer a preguntas de las partes en el juicio que se celebra en la sala del tercer piso de la sede de Penales de Yrigoyen 475.
Más precisa fue la profesional, la perito que especificó a consultas que “la menor estaba ubicada en tiempo y espacio, con un relato estructurado, sus dichos son compatibles con los de una persona que ha sido víctima de abuso”. Los jueces del TOC 4 seguirán en próximas audiencias con el proceso oral y público.