La Corte Suprema de la Nación dispuso ayer por la tarde una feria judicial extraordinaria en todo el país hasta el 31 de marzo.
El máximo tribunal determinó que se mantendrán las prestaciones mínimas a través de la implementación de guardias. El resto del personal quedará liberado de prestar servicios.
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En el segundo artículo de la resolución se detalla que cada tribunal deberá asegurar “una prestación mínima del servicio durante el plazo establecido, debiendo cubrirse prioritariamente con los magistrados y/o funcionarios que no se encuentren dentro de los grupos de riesgo”.
También dispuso una “licencia excepcional con goce de haberes” para los mayores de 65 años, quienes padezcan enfermedades que los hagan más vulnerables al coronavirus y las mujeres embarazadas. Se trata de una licencia voluntaria, aclaró la Corte en su acordada de ayer. El mismo carácter tendrá la licencia para los “padres, madres, tutores o adoptantes” de menores que concurran a establecimientos educativos.
Además, diversos organismos de la justicia federal y bonaerense tomaron en las últimas horas sus propias medidas: otorgar asueto judicial , licenciar a sus empleados mayores de 65 años y a quienes estén a cargo de hijos escolarizados, organizar teletrabajo (home office) y reducir las plantillas a lo indispensable en las dependencias judiciales.
En paralelo, ayer por la mañana el procurador general de la Nación , Eduardo Casal, jefe de los fiscales, decidió recomendar a los fiscales nacionales y federales de todo el país limitar la asistencia del personal a lo indispensable hasta el 31 de marzo, organizar trabajo en el domicilio y dar licencias a los mayores de 60 años o con padecimientos que los hagan entrar en situación de riesgo. Asimismo, dispuso justificar las faltas de los padres, madres o tutores a cargo de chicos escolarizados que deban permanecer de modo exclusivo a su cuidado.