Los presos de las unidades penales de la provincia de Buenos Aires podrán acceder a teléfonos celulares, según una resolución del Tribunal de Casación bonaerense.
La medida rige “durante el periodo que susbistan la situación de pandemia y la vigencia del aislamiento social, preventivo, obligatorio decretado por el gobierno nacional”, aunque, se sabe, el uso de telefonía móvil en los penales es moneda corriente y desde mucho tiempo antes de que aparezca la situación desatada en el país por la pandemia de coronoavirus.
Ya se había dictaminado una resolución similar para el penal de Batán a pedido de la Comisión Provincial por la Memoria y dado a lugar por el Juzgado de Ejecución Penal N 2 de Mar del Plata, a cargo de Juan Galarreta. También el juez Anselmo González encomendó lo mismo al Servicio Penitenciario (SPB) para los penales de Baradero y San Nicolás, a instancias de la Defensora Judicial de San Nicolás, Mariana Garro.
La resolución fue firmada por el vicepresidente del Tribunal, Víctor Violini, y dispone la creación “del necesario protocolo normativo para la implementación de la autoriazación que deberá ser concretada en la órbita del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la provincia”.
Y agrega: “De modo que asergure la efectiva comunicación de los internos con sus familiares y que no sea utilizada con fines ilícitos, Hasta tanto se concrete el dictado del Protocolo referido, se pondrá en cabeza de los respectivos jefes de las unidades carcelarias, la determinación de pautas adecuadas y razonables de ingreso, uso y conversvación de los dispositivos telefónicos”.
Por su parte, el SPB ya había implementado en algunos penales un sistema de videoconferencias entre internos y familiares en el contexto de la emergencia y ante la suspensión de visitas.