Un interno que fue trasladado a una unidad del Servicio Penitenciario Bonaerense, tal como habían solicitado organismos de derechos humanos y un abogado particular, declaró ayer en sede judicial de Florencio Varela en el marco de la causa que investiga a tres penitenciarios acusados del crimen de Federico Rey, el joven de 23 años que murió tras recibir heridas con perdigones de plomo en un motín en el complejo carcelario de La Capilla.
Ayer en horas de la mañana y por varias horas el testigo -que cumple condena por otros delitos- brindó su relato en la sede de Presidente Perón ante los funcionarios actuantes en la causa y a requerimiento de él mismo como de organismos de DDHH fue trasladado a otra unidad, vale recordar que se encontraba alojada en la de Magdalena y había denunciado amenazas en contra de su integridad física.
Se recordará que en el motín del pasado 22 de abril, el interno resultó muerto tras recibir un disparo proveniente de efectivos del Servicio Penitenciario Bonaerense. Por el asesinato hay tres agentes detenidos y procesados. Se trata de Gastón Ábila, que al momento de la revuelta cumplía funciones como subprefecto; Gabriel Darío Bergonzi, subdirector de Administración y la alcaide mayor, Eliana Heidenreich, jefa del Grupo de Asistencia y Seguimiento, principal imputada de ser la autora de los disparos con perdigones de plomo.
Ayer el preso brindó su relato a la causa donde lo hizo por varias horas en la diligencia judicial a cargo de la fiscal Roxana Giménez y la ayudantía fiscal del doctor Cristian Granados.