La presidenta de la Asociación Sindical de Profesionales de la Salud (CICOP), Marta Márquez, aseguró que los hospitales bonaerenses del Conurbano Sur “están sobrepasados, con mucha más ocupación de camas de Terapia Intensiva que en otros sectores de la provincia”. Además sostuvo que el Evita de Lanús “es uno de los más afectados” porque tiene “una gran cantidad de trabajadores contagiados”.
“En general están con un 80 por ciento de la ocupación, bastante más alto que el manifestado desde el gobierno para todo el Conurbano y un poco más que en otros sectores del Conurbano”, informó la titular del gremio que nuclea a los profesionales de la salud de Buenos Aires.
Con foco en los hospitales provinciales del Conurbano Sur, Márquez resaltó al Evita de Lanús como uno de los más conflictuados porque “otra vez está con problemas la Unidad de Terapia Intensiva”, donde incluso durante dos semanas no se recibieron pacientes por los contagios registrados dentro de su plantel.
“Como hay una gran cantidad de trabajadores contagiados ahí, la situación de la Unidad de Terapia intensiva es crítica y es uno de los más afectados de la provincia después del Hospital Belgrano de San Martín, donde se registraron más de 40 profesionales de la salud infectados”, puntualizó.
Sin embargo indicó que en el Gandulfo de Lomas de Zamora, el Fiorito de Avellaneda o el Lucio Meléndez de Almirante Brown también hay problemáticas de peso pero “están menos mal” que en el nosocomio lanusense.
Por otra parte advirtió que en estos centros de salud “hay falta de personal”, aunque aclaró que esto “va más allá de los hospitales del sur del Conurbano” pero que “agrava la situación general” sumado a que además hay “gran cantidad de trabajadores contagiados”.
“No hacemos otra cosa que todos los días sumar más y más compañeros que se contagian en la provincia, los cuales son más de 10 mil, más allá de la lamentable cifra de fallecidos en el sistema de salud bonaerense, que ya son 48 en total”.
En esa línea, Márquez consignó que ambos problemas se conjugan porque cuando un trabajador de la salud se contagia debe apartarse del sistema de atención por, al menos, dos semanas al igual que sus contactos estrechos, entre ellos compañeros, y a raíz de eso “un servicio puede quedar durante ese tiempo con personal muy reducido y una enorme sobrecarga laboral”.
Y remarcó que “tener camas, respiradores y otros dispositivos como hospitales modulares no sirve para nada si no está acompañado con el personal idóneo necesario para atender a la gente”.
Asimismo, consignó que “pese a la complejidad del momento no se están rechazando pacientes” pero “a menudo se tienen que poner en marcha derivaciones porque no hay donde internar ante la falta de personal”.
“El déficit de personal está directamente relacionado con los salarios que paga la provincia de Buenos Aires a sus trabajadores de la salud” y señaló como agravante de la situación que la ministra bonaerense de Trabajo, Mara Ruiz Malec, anunciase que no habrá paritarias para los trabajadores estatales. “Con nosotros incumplieron el llamado a paritarias en junio como se pactó en abril”, reveló.
En paralelo, la falta de personal también hace que desde la provincia no se otorguen licencias a los trabajadores incluidos en los grupos de riesgo pese al decreto emitido por el gobierno bonaerense en el marco de los empleados estatales, lo que hace exponerlos ante potenciales contagios alimentando el círculo vicioso entre trabajadores enfermos y falta de personal.
“Esto hace que un sector esté en situación de riesgo por su situación sanitaria o su edad y entre los fallecidos hay una buena porción de compañeros que no deberían haber estado trabajando. Se toma otra vez una decisión a costa de la salud de los trabajadores”, criticó Márquez.
Fuente: Diario Conurbano