El fiscal del caso Salvador Altamura, el abogado desaparecido desde hace más de un mes, pidió la captura de un amigo del letrado que está sospechado por el robo a la vivienda de la calle 25 de Mayo en Quilmes Centro como de la desaparición de Altamura. El allegado a la víctima es buscado por la Policía en el marco de la causa: “es un avance” y que “sabemos que no puede estar demasiado lejos por la pandemia”; dijo a este medio Lilia, hermana del abogado.
Ayer en horas de la mañana el fiscal Ariel Rivas, titular de la UFI 1 de Quilmes recibió a los familiares del letrado y les comunicó el cambio de carátula a “robo agravado por utilizar la llave verdadera y privacion ilegitima de la libertad agravada”. El imputado por este hecho en caso de ser hallado responsable penal podría recibir una pena de 8 a 25 años de prisión.
A la requisitoria del doctor Rivas hizo lugar el juez de Garantías, Juan José Anglese. El fiscal consideró que existen elementos para el cambio de carátula, vale remarcar que el fin de semana se procedió al allanamiento de la casa de un amigo de Altamura, que está imputado por los hechos y no fue encontrado ni en su domicilio como tampoco en la residencia de su madre, por lo que pesa sobre él un pedido de captura. Fuentes judiciales confirmaron que el expediente pasó de “averiguación de paradero” a “robo agravado por la utilización de la llave verdadera en concurso ideal con privación ilegitima de la libertad coactiva”.
Por el hecho era buscado un amigo de Altamura, identificado como Darío Daning (52), del que se sospecha que fue quien ingresó al domicilio del abogado y quedó captado por las cámaras de seguridad.
“La hipótesis es que el amigo lo privó de la libertad para apoderarse de los bienes del abogado, es decir de su moto, su casco y una caja de seguridad con mucho dinero”, precisó una fuente del caso.
El procesado es un hombre de extrema confianza de la víctima, que ya fue aprehendido por personal de la DDI Quilmes apenas se iniciaron las actuaciones judiciales y sobre el pesa la sospecha que estaría relacionado con la desaparición del profesional quilmeño. “Es un avance” y que “sabemos que no puede estar demasiado lejos por la pandemia”; dijo a Data Judicial Lilia, hermana del abogado.
Salvador Altamura (48), es abogado pero no ejercía la profesión, y en la actualidad corría en forma amateur carreras de motociclismo, había vendido una empresa de polietileno y polipropileno, y actualmente continuaba con la importación de las materias primas para ese rubro industrial.
El último rastro que se tiene de Altamura es un video de una cámara de seguridad que lo captó el lunes 13 de julio a las 18.06, cuando pasaba con su moto por el frente de su edificio de la calle 25 de mayo al 200, de Quilmes. Según lo que puede verse en las imágenes, a Altamura se lo ve llegar circulando, aminora la marcha y luego acelera y sigue de largo.
Alrededor de las 4.30 de la madrugada del martes 14, las cámaras del edificio de Altamura captaron la imagen de la llegada de la moto Honda CRF 250 roja y blanca del abogado pero montada por otro hombre de distinta contextura física, ya que el abogado mide 1,90 metros y el que llegó en su moto era más bajo y más robusto, aunque usaba el mismo casco. Según denuncia la familia, esa persona permaneció cerca de una hora y media en el edificio y luego se retiró.