Un grupo de delincuentes concretó una violenta entradera en la localidad de Gutiérrez, donde golpearon a la dueña de casa y le robaron dólares y pesos. Por el caso, fue detenida la empleada doméstica de la víctima, acusada como presunta entregadora.
El hecho tuvo lugar el viernes 19 de marzo alrededor de las 10.30 de la mañana, cuando tres delincuentes llegaron hasta un domicilio de la calle 408 al 900 a bordo de un Fiat Siena. Uno de ellos se quedó al volante como “campana”, mientras que los dos restantes ingresaron al inmueble tras reducir a la empleada doméstica (41), quien se encontraba baldeando el patio delantero.
Luego, los ladrones sorprendieron a la propietaria de la vivienda, a quien golpearon y maniataron. Acto seguido, fueron directamente hacia una máquina de coser, donde la víctima había escondido la fuerte suma de dinero y se dieron a la fuga raudamente.
Llamó la atención de los investigadores de la Comisaría Tercera de Berazategui, al mando del comisario Matías Castiglione, el hecho de que los bandidos robaran el celular de la trabajadora, pero no así el de la dueña de la finca. Asimismo, en la declaración de la víctima se dejaron en evidencia algunas situaciones extrañas que ocurrieron esa mañana, como que la empleada llegara dos horas tarde y alcoholizada.
En efecto, al revisar los videos de las cámaras de seguridad de la casa confirmaron las sospechas: la mujer habría mantenido un diálogo previo con los hampones mientras limpiaba el patio y les abrió el portón facilitando su acceso. “La mujer, que trabajaba en la casa desde hacía un año, era la única que podía saber dónde estaba el dinero”, señaló una fuente del caso.
Fue así que, tras detectar contradicciones en el relato que la sospechosa había brindado como “testigo” ante las autoridades policiales, determinaron que sería ella la presunta entregadora y que mantendría una relación amorosa con uno de los supuestos asaltantes. En las últimas horas fue detenida acusada como “partícipe necesario” en robo.
En tanto, la Fiscalía Nº 1 de Berazategui otorgó cuatro órdenes de allanamiento, dos de las cuales se dieron en el partido de Quilmes, en busca del sindicado como líder de la banda delictiva. En un domicilio de las calles Unamuno y Triunvirato la Policía secuestró documentación del imputado, quien tendría antecedentes penales y un juicio pendiente por “robo agravado” que iniciaría en junio de este año en los Tribunales quilmeños. El gabinete criminológico de la Seccional Tercera de Gutiérrez continúa por estas horas la búsqueda de los tres bandidos prófugos, así como también del botín sustraído. Por el caso no se descartan más allanamientos en las próximas horas en distintas localidad de la provincia de Buenos Aires.