El Gobierno porteño ordenó por decreto a los efectores del sistema de salud privado y los de la seguridad social de la Ciudad a “reprogramar y suspender” por 30 días “la atención programada y las intervenciones médicas vinculadas a patologías que con criterio médico no sean de carácter urgente”.
La decisión responde a la intención de “contar con la mayor cantidad de recursos asistenciales disponibles que permitan la atención de pacientes con Covid-19, tanto ambulatoria como de internación”, se informó.
Textualmente, la norma dice en su Artículo 1: “Establécese que los efectores del subsistema de salud privado y los de la seguridad social deberán reprogramar y suspender, durante el plazo de treinta (30) dias corridos, la atención programada y las intervenciones médicas vinculadas a patologías que con criterio médico no sean de carácter urgente o que no puedan ser discontinuadas o postergadas, a fin de contar con la mayor cantidad de recursos asistenciales disponibles que permitan la atención de pacientes con COVID-19, tanto ambulatoria como de internación”.
La medida, refrendada por el ministro de Salud, Fernán Quirós, el jefe de Gabinete de Ministros, Felipe Miguel, y el jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez LArreta, “entrará en vigencia el día de su publicación en el Boletin Oficial de la Ciudad de Buenos Aires”.