Hace un año y dos meses, la familia de Francisco Cruz no tiene consuelo y solo piden que al fiscal que investiga su muerte justicia y la detención de quienes participaron en su muerte. Los acompaña legalmente la Comisión Provincial por la Memora, pero aun así nadie sabe quién aquella madrugada del 13 de marzo de 2020 le quito la vida.
Esther Quijano, la única hermana que Francisco tiene en Buenos Aires, ya que el resto de su familia se encuentra en Corrientes. La mujer que vive en la zona de Ingeniero Allan contó que la última reunión que mantuvieron con el fiscal Provisionato fue para finales de pasado año, donde por primera vez se reunió con el titular de la UFI N°1, quien continúa a cargo de la causa dado a que en pedido del Fiscal General de Quilmes no prosperó la recusación que habían solicitado. Allí, se habría logrado, por insistencia de la CPM “el secuestro de los celulares a los 4 policías que aquel 13 de marzo subieron al patrullero a Cruz”.
Que la justicia llegue al pobre
Están desesperados y temen que nunca se esclarezca qué paso con Francisco. “Lamentablemente siempre el pobre no va a tener justicia. Nunca , porque no tenemos dinero para mover los papeles es muy lamentable esto pero es la verdad” aseguró indignada esta correntina que vive en su casa de La Carolina en Ingeniero Allan y que clama justicia por su hermano menor. Esto es muy difícil para nosotros, ya que no contamos con el apoyo de nadie. Queremos que se sepa lo que le paso a mi hermano y que no quede impune la muerte de él y no le pase a otros chicos inocentes como era mi hermano” remarcó en su pedido.
Comisión por la Memoria
La Comisión por la Memoria fue clave para la aparición de Francisco, ya que su presentación de “habeas corpus en el Juzgado de Garantías N°5”, permitió que “sorpresivamente” fuera encontrado el cadáver de Francisco a metros donde la policía declaró que lo había dejado.
“Los oficiales que lo subieron al patrullero declararon que ´dejaron a Francisco en la parada del colectivo para que vaya a su casa´ por eso frenaron en Avenida Hudson y la calle 1356 a la 1:50 de la madrugada; 1356 es la calle que entra para el Museo Provincial Hudson, es una zona donde los años de abandono del Municipio se notan de lejos, no existe ninguna luminaria en un tramo de aprox. 800 metros, de un lado hay una tosquera convertida en semi basurero, del otro lado descampado y a unos metros narcos vendiendo droga las 24hs. Tampoco hay una parada de colectivos convencional” narran los familiares de Cruz, quienes se constituyeron como particulares damnificados en la causa con patrocinio letrado de la CPM. Hoy por hoy, la investigación de la Comisión por la Memoria, continua reclamándole al fiscal de la UFI 1 “los informes de los celulares, de la pericia toxicológica completa, el vinculado a cómo se produjeron las lesiones y el sobre qué es la sustancia negra que había en ese lugar donde lo encontraron a Cruz”.
El caso
Francisco Cruz tenía 29 años, era oriundo de la ciudad capital de Corrientes, un albañil de oficio, un trabajador golondrina que había pasado por zonas como Punta Lara y otros lugares del conurbano bonaerense. Se había instalado hacía poco en una casilla de la zona del barrio La Carolina en Ingeniero Allan, junto a su hermana.
El 13 de marzo de 2020, fue aprehendido por efectivos policiales del Comando de Patrullas. Según los integrantes de los dos móviles de esa seccional, lo dejaron sobre la avenida Hudson y la calle 1356 a la madrugada. Su cuerpo fue encontrado en una tosquera cercana cinco días después, mientras sus familiares realizaban la denuncia. En su autopsia, presentaba lesiones vitales en el rostro y en ambos hemitórax y lesiones producidas por terceros con pérdida de tejidos en piernas y brazos.