Tras una década de investigación, lo más cercano a su paradero fue que habría visitado un santuario de la Difunta Correa en Salta, a donde llegó haciendo dedo, como última vez que la vieron con vida. Ese día, Cash fue captada por las cámaras de seguridad de la entonces empresa concesionaria de la autopista, en la plaza de peaje.
Su historia luego estuvo repleta de dudas y situaciones confusas: el 5 de julio de 2011, se bajó del micro en Tucumán porque “había gente que no le gustaba”, dijo su hermano.
Luego tomó un ómnibus a Jujuy, pero se bajó en Rosario de la Frontera, Salta. Un camionero la llevó a Santiago del Estero y recién desde ahí llegó a Jujuy el 6 de julio, gracias a un pasaje sacado por un amigo desde Buenos Aires.
Según se informó oficialmente, el Sistema Federal de Búsqueda de Personas Desaparecidas y Extraviadas (Sifebu) coordinó una mesa interinstitucional para avanzar en la búsqueda, mientras la familia de la mujer fue informada sobre las pesquisas que se hicieron hasta ahora.