Una pericia de cotejo de ADN realizada en La Plata confirmó que los restos carbonizados de un cuerpo que habían aparecido en la ribera de Quilmes meses atrás pertenecen al pescador Ramón Galeano, que era buscado por su familia desde diciembre de 2020. Data Judicial pudo confirmar la información en fuentes judiciales y la familia ya fue notificada de la lamentable noticia.
En los hechos interviene la fiscal Karina Gallo, titular de la UFI N° 4 del Departamento Judicial Quilmes. “Oreja” o “Pachu”, como era conocido, estaba desaparecido desde las vísperas del 25 de diciembre cuando visitó a una de sus hermanas por la Navidad en la ciudad de Quilmes. Desde entonces nada se sabía de él hasta ayer.
Según su propia familia, en un caso que también investiga la fiscal Gallo, Galeano había mantenido una violenta pelea en un barrio cercano a la Ribera, donde solía pescar. Solo restaba una pericia clave: un estudio de ADN a material que había sido recuperado de la médula ósea del esqueleto mediante una perforación, la última chance para identificarlo que quedaba.
Así ayer sus familiares se notificaron de la peor noticia, los restos carbonizados eran de Galeano.