Una insólita situación se vivió en la mañana de este miércoles en el Centro de Emergencias Quilmes, al que acudió un chofer de ambulancia para renovar su registro de manejo. Es que en la parte trasera de la unidad de traslado llevaba un cadáver, al que debía transportar hasta una casa funeraria.
El mal momento elegido por el conductor despertó la sorpresa e indignación de los presentes en el lugar. Es que, según informaron fuentes de la dirección de Licencias de Conducir, el hombre pedía que lo atendieran rápido ya que “llevaba un cuerpo en la ambulancia”.
Ante la incertidumbre de los funcionarios, el chofer abrió las puertas de la unidad para demostrar que decía la verdad. Sin embargo, los empleados municipales reaccionaron horrorizados y decidieron no atender al ambulanciero, al tiempo que dieron aviso al 911. Personal del gabinete de calle de la Comisaría Novena se apersonó en el lugar, pero no tomó medidas con el sindicado ya que entendieron que no incurría en delito alguno.
Fuente: InfoQuilmes