En una acción colaborativa, el Municipio de Florencio Varela, el ministerio de Educación de la Nación junto al Centro Ana Frank inauguraron una plataforma interactiva e itinerante donde reflexionar sobre la tolerancia, la identidad, libertades individuales, solidaridad y discriminación.
Estudiantes secundarios provenientes de distintos establecimientos educativos varelenses completaron el período de capacitación para oficiar como guías durante el recorrido de los visitantes por una exposición que reconstruyó la habitación de Ana Frank e incluyó información sobre el Holocausto más la última Dictadura Cívico Militar Argentina.
Durante la apertura formal de la exhibición, efectuada frente al edificio comunal, el subsecretario de Gobierno -Gustavo Rearte- repasó la génesis del proyecto. “Queríamos una plataforma donde abordar desde perspectivas diferentes acontecimientos históricos que marcaron una época; utilizarlos para repensar nuestra sociedad con el amor como bandera para erradicar la violencia e intolerancia”, detalló.
Posteriormente, el funcionario señaló la determinación de “crear un ámbito donde promover el intercambio de ideas entre la juventud, las instituciones junto a la comunidad en general”. “Tender puentes para construir sueños colectivos. Anhelos de vida hacia un futuro diferente con inclusión e igualdad en una patria justa, libre y soberana”, afirmó.
La titular en la cartera de Educación -Andrea Digiobani- subrayó la elección del distrito para la puesta en marcha de la iniciativa. “La jornada consistió en escuchar a los chicos y las chicas a partir de sus experiencias. Sus testimonios reflejaron el resultado positivo de la propuesta”, narró.
“Fue un orgullo materializar una acción que posibilitó la formación de alumnos y alumnas para ser claves partícipes en el Museo como anfitriones durante cada visita”, aseguró la integrante en el gabinete del intendente Andrés Watson. Además, hizo hincapié en la articulación entre los distintos actores del sistema educativo, la Comuna más los diferentes estamentos gubernamentales para desarrollar el cronograma planificado.
El presidente de la entidad, Héctor Shalom, detalló la formación de 36 jóvenes, quienes asumieron la responsabilidad de guiar a las personas durante el itinerario. “El contenido cobró sentido en la voz de adolescentes para analizar episodios discriminatorios o situaciones de violencia con la intención de identificar cuando alguien atravesó esas circunstancias o fue el causante del ataque e impedirlos”, especificó.
La representante de la Secundaria Nº 63 de Bosques Norte, Brenda Benedetti, mencionó: “Observamos imágenes de la casa que ofició como escondite de Ana y su familia. Me llamó mucho la atención su cuarto”. El director de la institución, Eduardo Perrone, puntualizó sobre el trabajo en las aulas desde el año pasado. “Examinamos acontecimientos relacionados a los derechos humanos como la igualdad de género e identidades”. Además, agradeció al Municipio por “la organización del evento y por hacernos partícipes del mismo”.
Tanto Camila como Elena -guías a cargo- contaron que los participantes mostraron “mucha curiosidad e interés”. “La historia de Ana permitió una tarea multidisciplinaria para repasar lo sucedido”, coincidieron. Las jóvenes describieron el trayecto: una síntesis por el contexto y la historia de Ana Frank, para continuar con un espacio de recreación del escondite, el cuarto de la niña-adolescente. En la instancia final, invitaron a un análisis sobre temas actuales como la vulneración de derechos.