En la jornada de alegatos por Adrián Albanese, el dueño de la pizzería de Banfield asesinado durante un asalto en julio de 2019, la fiscalía pidió la prisión perpetua para uno de los imputados, el único que por el momento llegó a juicio. Por su parte la defensa expresó que no corresponde la calificación legal.
En diálogo con DiarioConurbano.com, Facundo Ferro, particular damnificado, aseguró: “Nosotros creemos que está todo probado sobre cómo fueron los hechos para que sea condenado a perpetua pero ahora resta que el Tribunal decida”.
La fiscalía, a cargo de Sandra Rull, y Ferro pidieron esa pena al entender que Denis Iván Ramírez, único imputado en este juicio, cometió un robo agravado por arma de fuego en concurso real por homicidio criminis causa. Según lo explicado, el acusado asesinó a Albanese “al no poder llevarse el motín que quería”.
En este sentido, Ferro opinó: “Ellos querían más dinero y la alianza de Adrian. Al no poder concretar eso, le termina disparando en la cabeza lo que le provoca la muerte”, especificó el letrado.
Por su parte, la defensa no pidió la absolución pero afirmó que la calificación legal por la que se juzga a Ramírez “no corresponde” ya que considera que es un homicidio en ocasión de robo, un delito por el que obtendría una pena menor.
El Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 8 de Lomas de Zamora será el que resuelva el veredicto el día 1 de diciembre a las 11 hs. En este marco, Verónica, la viuda de la víctima, expresó que no cabe otra pena que la prisión perpetua si se tiene en cuenta la prueba presentada durante el juicio.
“Está todo demostrado para que sea la condena que pedimos. El proyectil que mata Adrián es la misma pistola que usaba el imputado, los testigos fueron contundentes y no caben dudas de su responsabilidad”, manifestó Verónica.
El hecho ocurrió el 20 de julio de 2019 cuando tres personas armadas ingresaron a la pizzería “Don Albanese”, que estaba ubicada en la esquina de avenida Adolfo Alsina y Peña, en Banfield. Tras exigirles a los clientes que estaban en el lugar sus pertenencias también se robaron el dinero que había en la caja registradora. Según algunos testigos, el dueño del local nunca opuso resistencia y entregó el dinero, pero los delincuentes le pidieron la alianza. Adrián no pudo sacársela y le dispararon en la cabeza. Luego de cometer el robo, los delincuentes se escaparon en un Ford Ka color blanco por la avenida en dirección a Remedios de Escalada, partido de Lanús.