La Justicia de Quilmes podría condenar esta semana a un joven a la pena de 13 años y 6 meses de prisión en caso de hacer lugar a una requisitoria del fiscal en la instancia de los alegatos en el juicio en el que Maximiliano Mansilla reconoció haber disparado y herido a Facundo Saldaño en el contexto de una pelea en el Barrio La Paz de Solano en septiembre de 2016. Además se le endilga el robo a una vivienda en la zona de Quilmes Oeste. La defensa de Mansilla alegó porque se lo sentencie al minimo de pena por tentativa de homicidio.
Los hechos que se ventilaron en el Tribunal Oral N° 4 de Quilmes, en la sala del tercer piso, se dieron el 10 de septiembre de 2016 en 803 y Camino General Belgrano en circunstancias en que se enfrentaron dos bandos antagónicos, fue así que Mansilla efectuó un disparo de arma de fuego contra otro grupo provocándole heridas al fallecido Saldaño que derivaron en su deceso. El doctor Claudio Pelayo valoró los propios dichos del encartado como además los informes que constan en la causa, por otra parte le adjudicó un robo a una finca en la zona de Madame Curie en Quilmes Oeste; el fiscal desistió de la imputación por otro homicidio al considerar que no existían elementos probatorios para sostener los cargos.
Los jueces Andrea Calaza, Alberto Ojeda y Pablo Pérez Marcote escucharon con atención lo expuesto por el fiscal y luego dieron la palabra al defensor oficial de Mansilla, doctor Roberto Campo que valoró los dichos de su asistido aunque profundizó sobre una mala praxis realizada por los médicos que atendieron al fallecido Saldaño en la unidad de atención primaria de la zona oeste que más allá de tener un disparo a la altura del tórax, luego de una revisión y una radiografía le dieron el alta y lo enviaron a su casa. Dicha situación derivó en que Trejo se descompensara en la vía pública, fuese llevado de urgencia al Hospital de Quilmes y a pesar de haber sido intervenido muriera en la cirugía.
El doctor Campo fundamentó su pedido de mínimo de pena por tentativa de homicidio o subsidiariamente lesiones culposas en la “mala praxis” de los médicos que lo asistieron en primera instancia al fallecido Saldaño: “no queremos decir que el resultado final no hubiese sido el deceso, pero es claro que Mansilla no tuvo intenciones de matar y que como dijo el doctor Paladino (convocado como testigo en las audiencias de producción de prueba) la evolución clínica de Saldaño otra podría haber sido”.
Durante las audiencias quedó expuesto en los testimonios de los citados por las partes que el encartado Mansilla tenía problemas de adicción a las drogas y estaba relacionado con un grupo que operaba en la comercialización de estupefacientes en la zona de La Matera conocido como “Los Paisa”. Los jueces del TOC N° 4 de Quilmes darán a conocer en el curso de la semana el veredicto condenatorio y el monto de pena al procesado.