La Justicia de Quilmes definirá la semana próxima si condena o absuelve a una madre que defendió a su hija en el marco de una tensa situación familiar acontecida en una finca de Ezpeleta en noviembre de 2009. Ayer la fiscalía pidió en los alegatos una pena de 3 años de prisión condicional por “homicidio en exceso de la legítima defensa” mientras que la defensa requirió la libre absolución al considerar que la mujer se defendió de un ataque.
Sandra Marcenaro está imputada por “homicidio” y en la víspera se escucharon los pedidos de pena de las partes ante los magistrados del Tribunal Oral N° 4 de Quilmes. Vale recordar que a lo largo del juicio había declarado la hija de la encartada: “Juan (por Juan Angel Sánchez, el fallecido) me dejaba encerrada y no me dejaba hacer nada, me tenía retenida en una vivienda. Asimismo me golpeaba con frecuencia por cualquier motivo, incluso cuando estaba embarazada con 15 años”.
Los hechos se dieron el 13 de noviembre de 2009 alrededor de las 21 en el inmueble sito en Buenos Aires al 1300 de Ezpeleta donde Marcenaro munida de un elemento cortopunzante le asestó dos puñaladas a Sánchez. El fiscal Claudio Pelayo solicitó una pena de 3 años de prisión de ejecución condicional al considerar que la mujer actuó en exceso de la legítima defensa y mató al novio de su hija; vale recordar que en las audiencias se ventiló una historia de violencia de género de parte del ahora fallecido en contra de la familia de la descendiente de Marcenaro.
A su turno la defensora oficial, Soledad López, requirió la libre absolución e hizo hincapié en los pormenores brindados por la hija de la imputada acerca de como el fallecido la encerraba en su vivienda, la amenazaba con armas blancas, la lastimaba con frecuencia y no dudó en pedir la absolución de la mujer ezpeletense.
Los jueces Andrea Calaza, Alberto Ojeda y Pablo Pérez Marcote darán a conocer la semana próxima el veredicto al que arribaron.