El diputado provincial Claudio Frangul presentó en la Legislatura Bonaerense un proyecto de ley que garantiza el derecho a la educación de niños y adolescentes con altas capacidades intelectuales.
La iniciativa, que lleva el nombre de “Ley Benjamín”, fue elaborada en conjunto con ONG dedicadas a la temática como “Mensa” y la familia del niño platense de siete años que obtuvo un fallo del Juzgado de Garantías N° 1 del Departamento Judicial de La Plata para continuar sus estudios. En 2020, con tan solo cinco años, Benjamín hizo primero y segundo de manera virtual y aprobó los niveles con puntaje excelente.
En 2021, mientras cursaba el tercer grado, la Dirección de Escuelas bonaerense planteó que debía retroceder y volver a segundo. Sus padres llevaron el caso a la Justicia. La sentencia del juez Atencio favorable a Benjamín fue ratificada por la Cámara de Apelación en lo Contencioso Administrativo.
El radical Claudio Frangul afirmó que “el fallo judicial que le permitió a Benjamín tener su proyecto pedagógico individual y promover a cuarto grado, cambió todo. Con este reconocimiento explícito del Estado de las altas capacidades intelectuales (ACI), ahora tenemos que ajustar la normativa para que la próxima familia que se enfrente a esta situación no tenga que pelearla recurriendo a la justicia”.
El legislador agregó que “en la actualidad los niños con ACI no son contenidos por el sistema educativo. Cuando uno habla con las familias lo que tienen en común es un gran sufrimiento en lo emocional. La incapacidad del sistema de reconocerlos los lleva a sentirse frustrados. Nosotros decimos basta de nivelar para abajo. Por eso impulsamos la creación de una dependencia específica en la Dirección General de Escuelas, una ventanilla a la que las familias puedan recurrir para dejar de obligar a sus hijos a encajar porque sí; que asuma la responsabilidad de la detección temprana y se encargue de realizar el proyecto pedagógico individual de acuerdo las potencialidades de cada caso”.
El proyecto pedagógico individual ya es de uso habitual para la inclusión escolar de los alumnos con discapacidad. Frangul explicó: “Además de garantizar el derecho del niño a ser oído en el proceso, impulsamos la posibilidad de la promoción parcial de uno o más cursos e incluso la promoción total al grado superior”.
Las altas capacidades intelectuales implican una capacidad excepcional para razonar y aprender en uno o más dominios como matemáticas o lenguaje. Aunque no hay estadísticas definidas, se considera que al menos el 2% de la población tiene un coeficiente intelectual superior a 130, son superdotados, y un 15% tiene altas capacidades.
El diputado Frangul agregó que: “es importante destacar que tener un niño con altas capacidades intelectuales no depende de la clase social, puede darse en cualquier contexto familiar”.
El proyecto establece un marco regulatorio para la detección y abordaje integral para niños y adolescentes de nivel inicial, primario y secundario con altas capacidades intelectuales. Se impulsan programas de capacitación en altas capacidades intelectuales tanto para los docentes activos, como para los espacios de formación docente.
El proyecto incluye sanciones en el caso de incumplimientos por parte de las escuelas y legitima para accionar a los padres o representantes legales en instancia administrativa y ante la justicia.
También se estimula la creación de especializaciones de posgrado en la temática en las universidades e institutos terciarios con asiento en la provincia. Las provincias de Jujuy, Chaco y Catamarca ya reconocen por ley las altas capacidades intelectuales y la necesidad de implementar proyectos pedagógicos individuales para garantizar el derecho a la educación.