El secretario general de la Unión Ferroviaria (UF), Sergio Sasia, repudió “la agresión contra el guarda de la línea Roca, Marcelo Varas, en la estación Temperley” y reclamó “más medidas de seguridad”, por lo que ayer decidió un paro en todos los ramales del servicio, que ya fue normalizado, luego de un acuerdo con la empresa Trenes Argentinos.
Sasia y el secretario de Administración de la organización gremial, Néstor País, repudiaron hoy en un comunicado de prensa “la agresión sufrida por Varas” y reseñaron que el de hoy fue “el tercer ataque consecutivo contra los trabajadores perpetrado esta semana”.
“Ayer fue agredido el trabajador Saucedo, del sector Control de Evasión, en la estación Ranelagh y, el domingo último, los maquinistas Maximiliano Cánepa y Nahuel Serrano y otros dos auxiliares en Bosques, por lo que se dispuso esta mañana una retención de tareas del personal de guardas a la espera de respuestas de la empresa”, afirmaron.
La UF exigió nuevamente “la presencia de fuerzas de seguridad pública en varias estaciones y formaciones, ya que los episodios de violencia contra los trabajadores deben cesar de inmediato a partir de la adopción de medidas pertinentes a fin de garantizar la realización de sus tareas de forma segura”, expresó el documento.
Los dirigentes detallaron que es preciso disponer personal de seguridad y de monitoreo en las formaciones y las estaciones con más problemas para contribuir de esa forma a la prevención y seguridad de trabajadores y usuarios y, luego de intensas reuniones, la empresa le garantizó al gremio que habrá “presencia de personal policial”.
“Habrá presencia policial en los trayectos a la estación Bosques en la totalidad de sus diagramas, que se sumarán a los ya determinados y, el 31 de agosto próximo, habrá una nueva reunión para continuar analizando la problemática que impacta de forma grave sobre los trabajadores y los miles de usuarios que a diario utilizan el ferrocarril”, dijeron.
La Unión Ferroviaria, luego de alcanzar ese acuerdo con la empresa, levantó esta tarde la retención de tareas, por lo que los servicios comenzaron a funcionar con normalidad.
La línea Roca, que cumple el trayecto entre Constitución y las localidades de La Plata, Ezeiza y Alejandro Korn, en el conurbano bonaerense, según sus ramales, sufrió esta mañana cancelaciones y demoras por una medida de fuerza adoptada por el gremio a partir de la agresión sufrida por un guarda a las 8.50 en la estación Temperley.
Una hora después la conducción nacional de la UF interrumpió de forma total el servicio durante 15 minutos y, luego, reanudó las operaciones con demoras y cancelaciones.
Hace algunos días, el Sindicato de Conductores La Fraternidad de esa línea realizó una huelga por la agresión a dos maquinistas, luego que el tren arrolló y mató a un niño de 5 años en la localidad de Bosques, en el partido bonaerense de Florencio Varela.
La línea Roca opera desde Plaza Constitución hasta La Plata; otro ramal llega a Ezeiza con extensión a Cañuelas y, el tercero, hasta Glew y Alejandro Korn, en el sur bonaerense.
El servicio ferroviario fue retomado a las 15, según confirmaron el gremio y la empresa Trenes Argentinos, luego de haber sido interrumpido de inmediato, pero a las 10.30 se había reanudado la protesta en todos los ramales porque los guardias de varias estaciones se sumaron a la determinación inicial del personal de Constitución.
La Internacional de Trabajadores del Transporte (ITF) de las Américas, Sección Ferroviaria, repudió esta tarde “los constantes hechos de violencia que sufren los trabajadores del sector y las agresiones por la inseguridad y la situación social”.