El jurado popular que estaba deliberando para dar a conocer el veredicto del juicio que se le sigue a cinco personas por el femicidio de Agostina Gisfman, quien fue asesinada a puñaladas y calcinada en mayo de 2021 en la localidad neuquina de Centenario, sufrió amenazas mediante pintadas en un baño en el que les advertían que “decidan bien”, por lo que la Justicia ordenó la suspensión del debate.
La decisión fue adoptada por la jueza de Garantías de Neuquén, Leticia Lorenzo, luego de que aparecieran pintadas las paredes del baño destinado exclusivamente al jurado popular con la leyenda “Decidan bien”, lo que fue considerado por el Ministerio Público Fiscal “una frase intimidante” y que “nunca antes había ocurrido” en un juicio por jurados.
Pasadas las 13, la jueza dio iniciada la audiencia de la que participaron todas las partes y los acusados del crimen cometido el 14 de mayo de 2021 en la localidad neuquina de Centenario y anunció la anulación del juicio tras considerar que lo ocurrido “es un hecho institucionalmente grave que no tiene antecedentes”.
La magistrada solicitó a la Oficina Judicial que en el término de los próximos 10 días fije una nueva fecha y constituya un nuevo jurado popular para llevar a cabo un nuevo juicio.
Tras conocerse las amenazas, el fiscal Agustín García convocó a una rueda de prensa en la que señaló que “el Ministerio Público Fiscal comenzará una investigación penal para intentar determinar quién o quienes fueron las personas que cometieron el hecho”.
Además, el Poder Judicial realizará actuaciones administrativas para determinar las responsabilidades internas, ya que intentarán establecer quién o quiénes tuvieron acceso al sector de baños exclusivos para el jurado popular.
El fiscal dijo que “es una situación muy grave que el Ministerio Público Fiscal va a investigar” y aclaró que “nunca antes había ocurrido un hecho semejante”.
Los jurados manifestaron que no podían garantizar imparcialidad
Reveló que “hoy por la mañana un jurado ingresó a un baño de hombres en la Ciudad Judicial y vio una frase intimidatoria en la que se hacía referencia a la votación que debían afrontar”.
“Decidan bien” era la expresión pintada sobre una de las paredes del baño destinado exclusivamente para los jurados a pocos metros de la sala de deliberaciones.
Tras descubrirse la pintada, el jurado la comunicó al resto de los miembros cuando continuaba la deliberación para emitir un veredicto contra los cinco imputados por el crimen de la joven de 22 años.
“Hemos escuchado a los jurados en una audiencia a puertas cerradas que mantuvimos esta mañana y no estaban tranquilos para seguir adelante con su función y manifestaron que en esas condiciones no podían garantizar imparcialidad en la toma de la decisión”, dijo el fiscal.
“Nosotros como Ministerio Público Fiscal no podemos permitir que se siga deliberando cuando las mismas personas que lo están haciendo manifiestan tener intranquilidad. Lo que ha ocurrido es muy grave, institucionalmente es muy grave”, sentenció.
Al respecto, la jueza Lorenzo atribuyó lo ocurrido a “un descuido de seguridad” y consideró que “una persona del jurado vivió una situación intimidatoria dentro del edificio judicial”.
“Sobre la base de lo ocurrido, si el jurado continuaba con la deliberación y emitía un veredicto en caso de ser de culpabilidad iba a generar dudas, y en caso de ser de no culpabilidad también podía generarlas”, dijo.
Cinco acusados por el femicidio
Mientras tanto continuarán detenidos los cinco acusados del femicidio de la mujer: Juan Carlos Monsalve, Enzo Monsalve y Maximiliano Zapata llegaron al debate como coautores por el delito de “homicidio triplemente agravado por haber sido causado con alevosía, con el concurso premeditado de dos o más personas y por haber sido perpetrado por hombres hacia una mujer en contexto de violencia de género (femicidio)”.
También Gustavo Chianese acusado de partícipe necesario y Ana María Peralta (esposa de Juan Carlos Monsalve) como instigadora.
El femicidio de Agostina Gisfman
Para los investigadores, el crimen de Gisfman se produjo el 14 de mayo del 2021 y su cadáver fue hallado en las inmediaciones de calles Juan Domingo Perón y José Brillo, de la localidad de Centenario.
Los peritos determinaron que la joven había sido asesinada a puñaladas y su cadáver había sido calcinado.
Los investigadores consideraron que el femicidio fue instigado por Ana María Peralta, quien había descubierto que su esposo Juan Carlos Monsalve le era infiel con Gisfman y hasta había encontrado fotos de ellos juntos. Ante esa situación, según los pesquisas, Peralta le pidió que matara a la joven y le planteó que, “si no lo hacía, rompería la relación”.
“El 11 de mayo y como Monsalve no había cumplido con lo que le había pedido, Perales abandonó la vivienda en la que ambos convivían y se fue hacia la localidad de San Javier, en la provincia de Río Negro. Ante esta situación, Monsalve intensificó la organización de un plan para asesinar a Gisfman, tal como le había exigido su esposa y por esta razón se contactó con Chianese”, indicó el fiscal García en su alegato. El plan incluyó a los otros imputados y trasladaron a Gisfman en una camioneta Chevrolet Tracker hasta la ciudad de Centenario, donde la asesinaron, dijo el fiscal.