Con sensaciones contrapuestas entre los familiares de las partes, un jurado popular declaró “no culpable” a un vecino que dejó ciego a otro joven en la localidad de Bosques en 2020 tras pegarle con un martillo un violento golpe en la cabeza; mientras los familiares del imputado Juan Manuel Ángel estallaron en un aplauso, la hermana de la víctima expresó su malestar por la decisión de los ciudadanos.
En la jornada el jurado consideró por 9 votos que el imputado Juan Manuel Ángel actuó en legítima defensa al golpear con un martillo en la cabeza al joven Gonzalo Amaya, cuando estaban trenzados en una pelea dentro de la vivienda de Ángel y que éste actuó de esa manera en resguardo de su familia. Con el pronunciamiento dado a conocer pasadas las 20.30 los vecinos que desde temprano asistieron a la sede de Yrigoyen 475 citados por el Tribunal Oral N° 1 de Florencio Varela avalaron la postura del defensor particular, Roberto Cazorla expuesta en la instancia de alegatos.
Durante la jornada los testimonios dejaron en claro un incidente entre Ángel y Amaya. A raíz de esa situación el encartado le aplicó un tremendo golpe a la víctima que derivó en daños que trajeron como consecuencia la pérdida de la visión de Amaya. “A mi hijo no puedo verlo nunca más”, había declarado entre sollozos y asistido por su hermana el joven que contó además las lesiones que sufrió y como cambió su vida desde ese incidente en mayo de 2020 en horas de la madrugada.
Agotada la prueba, las partes brindaron su alegato, el fiscal Dino Maistruk como el particular damnificado, Rafael Panza y el defensor particular, Roberto Cazorla. Los primeros pidieron a los 12 ciudadanos citados que condenasen a Ángel por “homicidio en grado de tentativa”, es decir que Ángel con su accionar “quiso matar a Amaya al aplicarle un certero golpe con un martillo en la cabeza”.
A su turno, el defensor Cazorla alegó por la libre absolución al referir que su ahijado procesal había actuado en “legítima defensa” cuando ingresaron en su vivienda. Lo que quedó en claro en el juicio fueron las lesiones gravísimas de Amaya que derivaron en que quedase ciego con un daño permanente e irreversible. Luego de las instrucciones de la jueza Florencia Butiérrez y las deliberaciones; finalmente por 9 votos el presidente del jurado dio a conocer la decisión en la sala de planta baja de Tribunales: “No Culpable”.
Madrugada violenta
Los hechos se dieron el 7 de mayo de 2020 a las 3 en una vivienda de Calingasta de la localidad de Bosques, cuando el imputado Juan Manuel Angel estaba trenzado en lucha con la víctima Gonzalo Amaya, en esas circunstancias el primero tomó un martillo dentro de su casa y le aplicó un contundente golpe en la cabeza a Amaya que derivó en el desvanecimiento de éste, su inmediata internación y lesiones de tal gravedad que le provocaron perder de manera constante la visión.