El hombre ingresó al local, le pidió hielo a la trabajadora y cuando ella se dio vuelta, le sacó el celular que estaba sobre el mostrador. El hecho ocurrió este sábado en una cafetería ubicada en la calle Garibaldi y Sarmiento, en el centro de la ciudad. Allí ingresó un sujeto que comenzó a hacer una serie de pedidos a la empleada para intentar distraerla.
«Me pidió un poco de hielo y noté intenciones de robo, entonces le dije que en ese momento no podía y que tenía que esperar que llegue mi compañera», comentó la víctima. «Él seguía pidiéndome mercadería para que le regale, entonces fui a la heladera y agarré el hielo», agregó.
En cuestión de segundos, el malviviente aprovechó la ausencia de la víctima y se guardó en su bolsillo el celular que estaba sobre el mostrador. «Cuando salió, busqué el celular pero ya no lo tenía, salí a seguirlo pero ya se había tomado el colectivo», concluyó.
Entre las características que tiene el delincuente, que no sería la primera vez que roba, mide 1.70 metros, tez morena, una cicatriz en la cara y un arito en la oreja. Ese día vestía deportivo y una gorra blanca, y había llegado con otra persona que lo esperaba afuera.