El abogado Fabián Améndola, quien representa a los padres de Fernando Báez Sosa en la querella por el asesinato a golpes del joven, dijo que “el hecho está recontra probado” y sostuvo que el defensor de los ocho imputados por el crimen ofreció “un alegato para las cámaras”.
El letrado, que junto a sus colegas Fernando Burlando y Facundo Améndola actúan como particular damnificado en representación de los padres de Báez Sosa, desestimó, a la espera del veredicto, el alcance del alegato de Hugo Tomei, a cargo de la defensa de los acusados y adelantó que si el fallo no es el esperado, lo apelarán.
En declaraciones a radio Provincia, Améndola afirmó que este caso se encuadra dentro de la figura de “homicidio doblemente agravado por el concurso premeditado de dos o más personas y alevosía”, por cuanto los agresores “se ponen de acuerdo de matar entre todos. Este acuerdo no requiere que exista un plan de larga data y puede ocurrir en el mismo lugar de los hechos”.
“El acuerdo está claramente acreditado porque hay una amenaza inicial de Thomsen a Fernando que se produce en el interior del boliche” afirmó.
Asimismo, recordó que “una vez que salieron de Le Brique, hubo una agresión contra un tercero que no tiene nada que ver con el caso, pero que nos sirve para señalar que cuando ellos solamente quieren agredir en manada a una persona, le dan unas piñas y cachetazos”.
Sin embargo sostuvo que “esto no fue el caso de Fernando”, a quien “le dieron dos golpes en la cabeza por la espalda, lo hicieron caer de rodillas y sin capacidad de respuesta. Esa coordinación obviamente no fue espontánea”.
En tanto, Améndola cuestionó el planteo de Tomei respecto a una posible violación al principio de incongruencia en los requerimientos de la acusación, debido a que “hubiera implicado un planteo de nulidad de la acusación”.
Sin embargo, reveló que “después de que se escuchó el alegato de Tomei, el fiscal nos pidió que nos acercáramos a los estrados y específicamente le preguntó si estaba introduciendo un planteo de nulidad, y concretamente dijo que no”.
“Fue una exposición para las cámaras porque no lo argumentó” dijo el abogado querellante, y agregó que “acá, la posibilidad de tener a todos los testigos y poder examinarlos con total libertad, termina dando un cúmulo de detalles mucho más importante que durante la declaración escrita”.
“Con sus críticas a los medios, él está evadiendo contestar lo que pasó esa noche. Y eso es tan claro que durante su alegato no se refirió a la prueba, salvo en algunas ocasiones de manera tangencial” enfatizó.“El hecho está recontra probado”, dijo Améndola y aseguró: “Nunca participé de un juicio con tanta cantidad de pruebas”.