El juez federal Julián Ercolini elevó a juicio oral y público otro tramo de la denominada “Causa Cuadernos”, que en este caso involucra a exfuncionarios y empresarios que habían sido excluidos en la parte inicial del proceso.
La lista de los nuevos enviados a juicio está integrada por el empresario Armando Loson; el ex subsecretario de Coordinación y Control de Gestión del ex Ministerio de Planificación, Roberto Baratta; su excolaborador Nelson Lazarte, el exjefe de Gabinete Juan Manuel Abal Medina y su ex secretario privado Martín Larraburu.
La decisión del juez fue consecuencia de un fallo de la Cámara Federal que rechazó un planteo de Loson, titular del Grupo Albanesi –que se dedica al negocio de la energía – sobre la validez de los cuadernos supuestamente confeccionados por el chofer Oscar Centeno.
Esos cuadernos, en lo que a Loson se refiere, tienen al menos mil irregularidades, entre tachaduras, sobre escrituras, correcciones y grafías diferentes a las de Centeno, lo que fue reconocido incluso por un peritaje oficial.
Sin embargo, la Cámara Federal rechazó que esas irregularidades sean suficientes para dictar la nulidad y así, con el camino despejado, Ercolini elevó a juicio otro tramo de la investigación.
Las situaciones de Loson, Baratta, Lazarte, Abal Medina y Larraburu se sumarán a las de los otros empresarios y ex funcionarios que ya están a la espera de que el Tribunal Oral Federal número siete fije la fecha del juicio.
Ercolini reivindicó “los elementos de prueba que permiten tener por acreditada la materialidad de los sucesos ilícitos investigados, como así también la responsabilidad de los imputados en los mismos”.
Sobre las irregularidades en los cuadernos de Centeno, proclamó: “las defensas tampoco alegaron razones que me convenzan de que la continuidad del trámite conforme el proceso legal establecido pueda redundar en algún perjuicio concreto”.
“El juicio oral se presenta como la instancia ideal de resolución de las opiniones divergentes en torno a las acusaciones que se erigen en su contra”, subrayó el juez.
La decisión de Ercolini es, en rigor, el cumplimiento de un pedido de elevación a juicio que había formulado el fiscal Carlos Stornelli en 2019. “Cada situación concreta fue valorada en función de los múltiples elementos probatorios incorporados que justificaron las distintas resoluciones adoptadas, por lo que también corresponde descartar la crítica realizada” por las defensas, sentenció Ercolini al disponer la elevación de este nuevo tramo de la causa a la etapa de debate.