Días atrás la AJB formalizó junto con la Departamental Mar del Plata, la denuncia por violencia laboral en los términos de la ley 13168, contra los titulares del Tribunal de Trabajo N° 4 de Mar del Plata, Alejandro A. Lerena y Mariano Riva.
En dicha presentación se hizo mención a que las acciones denunciadas y descriptas resultaban suficientes para llevar a los jueces Lerena y Riva a una suspensión preventiva y posterior Jury ante el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados y Funcionarios de la Provincia de Buenos Aires previsto en Ley 13661.
Al respecto, Oscar Yenni, Secretario Gremial de la AJB remarcó que “desde el gremio estamos realizando y realizaremos todas y cada una de las gestiones que resulten necesarias para erradicar la violencia en ese Juzgado”.
Asimismo, desde la AJB se hizo hincapié en la necesidad de una inmediata intervención del Tribunal para normalizar la situación existente ya que al día de hoy de tres integrantes, solo cuentan con uno. El Dr. Lerena posteriormente a la denuncia radicada en su contra presentó certificado solicitando licencia psiquiátrica. Y la tercera magistrada pidió hace tiempo un traslado producto del destrato sufrido por sus pares en el Tribunal.
Cabe recordar que la denuncia gira en torno a sucesos que involucran violencia -psicológica- laboral en un marco de violencia de género, cambios de lugar de trabajo, renuncias, licencias médicas y por violencia de género, violación sistemática de la carrera judicial y sumarios administrativos disciplinarios con la estricta prohibición de acudir a la asistencia gremial de la Asociación Judicial Bonaerense.
A todo esto hay que sumarle que quienes ejercían violencia laboral eran nada más ni nada menos, que aquellos que habían jurado ante la Constitución provincial para garantizar la vigencia material del derecho laboral, que por su carácter protectorio debe proteger a los y las trabajadoras judiciales de ese tipo de conductas (arg. leyes 13.168 y 26.485).
Las situaciones de violencia de género en el ámbito laboral datan desde el inicio del Tribunal y con el transcurrir de los años se fue profundizando, a punto tal que involucra a más de diez trabajadoras víctimas de diversos maltratos e incluso a la propia Jueza que originariamente integraba dicho Tribunal.