Luego de negarse a ordenar la detención de Pablo y Hugo Moyano en el año 2018, Carzoglio quedó suspendido de sus funciones. Fue por desobedecer a la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), que en ese momento estaba conducida por Gustavo Arribas. En tanto, este año el Jurado de Enjuiciamiento lo destituyó.
En base a esto, semanas atrás el exmagistrado confirmó que apelaría el fallo de su destitución “ante la Suprema Corte bonaerense para que se revierta la situación”. En ese aspecto, señaló: “Voy a seguir dando batalla en defensa de mi dignidad como argentino y como profesional desde mi lugar, contando lo que pasó en mi jury”, y agregó que, “de no contar con una aceptación, iremos con la queja a la Corte”.
Pese a todo esto, el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados y Funcionarios de la provincia de Buenos Aires rechazó ayer por improcedente el recurso presentado. “Se consideró que el recurso es improcedente ya que solo son revisables los fallos cuando hubo violación al derecho a la defensa del acusado, y no se consideró que este fuera uno de esos casos”, sostuvieron fuentes judiciales.
En tanto, ahora se estima que los abogados defensores irán a modo de queja ante el máximo tribunal por la negación del recurso.
Vale recordar que, al ser destituido, Carzoglio había señalado que “esta instancia es inapelable, pero tiene antecedentes que la Corte haya intervenido en el tema, así que vamos a seguir en la lucha. Consideramos que se han avasallado los derechos del debido proceso y de la defensa del juicio, hay sobradas muestras”.
En ese marco, el funcionario de la Justicia se había mostrado con la esperanza de volver a ser restituido, y remarcó que “la apelación es a la Corte bonaerense, y entendería que hay posibilidades de ir a la Corte Suprema”. Así, concluyó: “Vamos a evaluar toda la situación con mi abogado para hacer revertir ese fallo y que se haga justicia”.