Matías Bagnato habló tras la muerte de Fructuoso Álvarez González, autor de los asesinatos en la “Masacre de Flores”.
Lo hizo durante una conferencia de prensa en Balvanera junto a su abogada en donde reveló porqué Fructuoso estaba internado desde el 4 de abril en el Hospital Zonal General de Agudos Dr. Alberto Antranik Eurnekian en el Penal de Ezeiza.
“Hace poco hizo un pedido de prisión domiciliaria por problemas de salud. Me avisan que fue operado de la cadera y cuando lo trasladaron se puso materia fecal para que la herida se infecte y puedan otorgarle el beneficio. Falleció de una infección generalizada”, indicó Bagnato.
El sobreviviente de la masacre ocurrido el 17 de febrero de 1994 expresó cómo vive luego de que se diera a conocer la noticia de la muerte del asesino de su familia: “Es muy difícil poner en palabras todo. Fueron 30 años de lucha”.
“Me cuesta seguir adelante sobre todo porque cada seis meses él pedía ser liberado y yo no podía salir de mi casa. El que estaba detenido era yo”, sostuvo.
Además en la conferencia reveló quienes fueron sus motores de lucha junto a su abuela: “Por primera vez puedo decir que formé una familia. No lo conté porque tenía miedo que él me la quitara. Estoy en pareja con Nicolás y vivimos junto a su hermano Sebastián que tiene síndrome de down”.
“Solo quiero agradecer. Los medios nunca me dejaron solo a pesar de los años. Siempre sentí el cariño”, manifestó Matías.
La muerte de Fructuoso se dio a conocer el domingo al mediodía cuando el propio Bagnato publicó en sus redes sociales un emotivo mensaje en el cual expresó: “Hoy sí por fin puedo decir se terminó. Mami Pa Fer Ale Nico descansen en Paz. Los amo con todo mi corazón”.
Pedido de excarcelación y muerte
La última solicitada de Fructuoso ocurrió en marzo pero una vez más la jueza de Ejecución Penal número 1, María Jimena Monsalve, le negó la libertad condicional a Álvarez González.
En el escrito la jueza destacó los problemas psicológicos que padecía el asesino motivo por el cual decidió no otorgarle el beneficio: “Los argumentos fueron contundentes. Ella plasmó y manifestó todos los resultados de los informes que se le hizo a Fructuoso desde el equipo interdisciplinario del Penal de Ezeiza”, sostuvo Bagnato.
Durante sus años en la cárcel el hombre ya había solicitado en reiteradas oportunidades su liberación pero esta última vez “todo se salió de control” cuando decidió infectarse una herida de operación para poder ser beneficiado.
Desde el Penal confirmaron que murió producto de una infección generalizada en el Hospital Zonal General de Agudos Dr. Alberto Antranik Eurnekian de ese cárcel.