Momentos de emoción se vivieron ayer en la sede del Tribunal Oral N° 4 de Quilmes cuando se ordenó la libertad de Jorge Pompei, el vecino de Quilmes Oeste que estuvo casi tres años detenido siendo inocente; lo acusaron de haber matado a su esposa asfixiándola. El fiscal Claudio Pelayo desistió de los cargos en contra del hombre y de inmediato se ordenó que recupere la libertad, fue así que el vecino se quebró y abrazó con sus hijas que se encontraban en la sala de juicio. Más allá de eso, declaró el médico que realizó la autopsia de Rosana Rosales y reafirmó que la mujer “no se suicidó” y presentaba lesiones compatibles con una mecánica de asfixia que derivaron en un paro cardiorespiratorio que derivaron en su deceso.
Las hijas del hombre de 54 años lo acompañaron y expectantes aguardaron el momento en que el el doctor Pelayo a falta de elementos de prueba incriminatorios en contra de Pompei declinó de la acción penal aunque solicitó que se siga investigando a los fines de saber la autoría y responsabilidad penal de quien mató a la vecina de la calle Acha en Quilmes Oeste en noviembre de 2020.
El médico autopsiante convocado por el doctor Pelayo precisó que “una persona con su propia fuerza no puede quitarse la vida porque al momento de perder el conocimiento desactiva la fuerza”. Asimismo el galeno recordó que Rosales presentaba hematomas en su nariz y rostro compatibles con algún elemento que ejerció presión para realizar la acción mecánica de dejar sin aire a la víctima.
Los hechos
Todo empezó cuando el imputado Jorge Pompei llamó al 911 para denunciar el presunto suicidio de su mujer. Efectivos de la comisaría 9° fueron entonces hasta el lugar. Los policías encontraron el cadáver de la víctima sobre la cama en la habitación y, junto al cuerpo, había una correa de cuero de una cartera, con la que, de acuerdo al testimonio del esposo, la mujer se había ahorcado. En la casa estaban presentes tres de las hijas de la pareja y una nieta de la víctima. Todas brindaron sus relatos en el juicio.
Todos los testimonios fueron exculpatorios acerca de la responsabilidad penal de Pompei y ante tal situación en la víspera el fiscal desistió de la acción penal y los jueces Alberto Ojeda, Sandra Martucci y Andrea Calaza ordenaron en la misma sala de juicio del tercer piso de la sede de Penales a libertad del vecino quilmeño.