El abogado Hugo Tomei pidió ayer la reducción de la pena para los cinco rugbiers que recibieron el castigo máximo y la excarcelación del resto, todos implicados en el asesinato del joven Fernando Báez Sosa en Villa Gesell, en un episodio ocurrido en enero de 2020.
El letrado hizo esta petición durante una audiencia, en la que trató de revertir las penas que había impuesto la Justicia tras el juicio. De todas formas, se estima que recién a fines de este año habría una resolución sobre el pedido de Tomei.
Luego de la audiencia, que se llevó a cabo en la Sala II del Tribunal de Casación Penal de La Plata, Silvio Báez Sosa -padre de la víctima- confió en declaraciones a la prensa que “no se los veía arrepentidos” a los rugbiers.
Durante la audiencia tomó la palabra Máximo Thomsen, unos de los responsables directos de la muerte de Báez Sosa, a quien atacó en manada junto a sus amigos, en la puerta de un local bailable en Villa Gesell.
Según trascendió, Thomsen -el único de los imputados que habló- ratificó que no tuvo intención de asesinar a Báez Sosa. Distinta fue postura del abogado Fernando Burlando, quien aseguró que “hubo un plan” para matar a Fernando Báez Sosa y consideró que los ocho rugbiers “deben ser condenados a prisión perpetua”.
“Los recursos ya fueron planteados y ahora se realizó una audiencia de formalidad donde cada defensor utilizó media hora para mejorar los fundamentos”, indicó.
En febrero pasado, el Tribunal Oral Criminal de Dolores impuso la pena de prisión perpetua sobre Máximo Thomsen, Enzo Comelli, Matías Benicelli, Luciano y Ciro Pertossi; y de 15 años sobre Ayrton Viollaz, Blas Cinalli y Lucas Pertossi.
Todos están detenidos en el pabellón 6 de Melchor Romero, que es el lugar en el que fueron alojados desde antes del juicio, más allá de los rumores de traslado que no se concretaron.
Las perpetuas fueron en función de que la Justicia entendió que existió un homicidio agravado por premeditación y alevosía, esto es que planificaron el asesinato y que, incluso, luego se aseguraron el resultado de muerte de Báez Sosa en esa golpiza brutal del 20 de enero de 2020 a la salida del boliche Le Brique en Villa Gesell.