La comunidad de la parroquia Nuestra Señora de Czestochowa de Ezpeleta celebró el sábado su fiesta patronal, oportunidad en la que recibió la visita del Nuncio Apostólico Miroslaw Adamczyk, de origen polaco, que estuvo acompañado por el Obispo de Quilmes, Carlos José Tissera, representantes locales de la comunidad polaca, feligreses de la parroquia y de las comunidades parroquiales vecinas.
Ante un templo colmado, el Nuncio Apostólico, representante del Papa en Argentina habló de su Polonia natal, contó un poco de su historia de vida y explicó el trabajo en la Nunciatura. Además se alegró por la presencia de jóvenes en la celebración, dio cuenta de la enorme riqueza de la Iglesia en todo el mundo, y sugirió poder valorar las pequeñas cosas y disfrutarlas, como “un encuentro, una celebración, esta misa”.
Cerca del final del encuentro, el obispo Tissera regaló al Nuncio Apóstólico el libro “Monseñor Jorge Novak, un contemplativo en acción”, escrito por el sacerdote polaco de la orden de los Servidores del Verbo Divino José Gwozdm, que en esta misma semana fue regalado al Papa Francisco. Y el padre Eros Zardini, administrador parroquial de Czetochowa, en nombre de la comunidad entregó a cada obispo una estola de regalo.