Por unanimidad la Justicia de Quilmes condenó a la pena de prisión perpetua al femicida de Natalia Arebalo, la vecina de La Florida que falleció tras ser rociada con alcohol etílico, prendida fuego y agonizar durante cuatro días con el 75% de su cuerpo quemado. Los jueces del TOC 3 hallaron autor penalmente responsable a Jorge Monzón, la expareja de la mujer y dejaron en claro que además “era víctima de violencia de género”.
El fallo fue dado a conocer en los Tribunales Penales de Quilmes y los magistrados valoraron el relato vertido en Cámara Gesell por la hija de la fallecida que fue contundente en sus expresiones. En el pronunciamiento al que accedió Data Judicial se indica que “tengo debidamente acreditado que el 19 de septiembre de 2019, aproximadamente a las 0.30 horas, en el domicilio de la calle 827 y Camino General Belgrano, de San Francisco Solano, partido de Quilmes, Jorge Antonio Monzón, abusando de una relación de poder, con claras intenciones de causar la muerte, mediante la utilización de alcohol que le arrojó en el cuerpo a su concubina Natalia Elizabeth Arébalo, la prendió fuego, le provocó quemaduras en vías aéreas, cara, cuello, tórax, abdomen y miembros superiores, y finalmente el 23 de septiembre de 2019 se produjo el deceso de Natalia Arébalo como consecuencia de las quemaduras sufridas”.
Con relación a las pruebas acreditadas se precisa que “lo producido en Cámara Gesell es preciso”; al tiempo que se valora y agregan los dichos de un enfermero que fue el primero en asistir a Arébalo luego de sufrido el ataque mortal: “llevó a la mujer a la ambulancia y observó las quemaduras en el rostro, tórax, abdomen y miembros superiores; afirmó además, que el cuerpo estaba quemado en un 70 o 75 por ciento. Dijo que la acostó, que la interrogó por cómo fue el hecho; que primero no quería decirle nada y después le dijo que su pareja la roció con alcohol y después la prendió fuego. En este aspecto fue terminante y contundente, se lo notó veraz y firme en su dichos”; afirmaron los jueces Darío Hernández, Julián Busteros y Alejandro Portunato en su decisorio.
Otro de los contundentes elementos fue la historia clínica del Hospital de Quilmes: “en la hoja 82 específicamente se dejó constancia «Según referencia de la propia paciente fue rociada con alcohol por su marido y luego la “prendió” fuego».
“Se hizo justicia, cadena perpetua para el asesino”; expresó la familia de la fallecida en las redes sociales.