Tres hinchas del club Newell’s Old Boys fueron detenidos acusados del crimen de la aficionada de Rosario Central, asesinada de un piedrazo en la cabeza cuando conducía una motocicleta en el macrocentro de la ciudad santafesina, en el marco de los festejos por la victoria “canalla” en el clásico, informaron fuentes judiciales.
El episodio ocurrió sobre la calle Ovidio Lagos, entre Montevideo y avenida Pellegrini, cuando Ivana Paula Garcilazo Bellón (32) conducía una motocicleta de baja cilindrada mientras la acompañaba su novio en el asiento trasero, vistiendo ambos ropa ligada al club Rosario Central.
En esas circunstancias y luego del clásico rosarino en el que Central ganó por 1 a 0 en el Gigante de Arroyito, hinchas de Newell’s comenzaron a lanzarles piedras, una de las cuales impactó en la cabeza de Garcilazo, quien perdió el control de la moto, cayó al asfalto y murió.
Dos ambulancias del Sistema de Emergencias Sanitarias de traslados (SIES) llegaron ante un llamado al 911 y los equipos médicos intentaron reanimar a la víctima, que yacía sobre la calzada sin signos vitales, mientras que su pareja resultó ileso del ataque.
A partir de ello, efectivos de la Policía Motorizada detuvieron a tres hinchas de Newell’s a tres cuadras y media del lugar del crimen, mientras que el fiscal Ávila acudió al lugar del crimen, donde comisionó al gabinete criminalístico para el relevamiento de la escena del hecho, levantamiento de rastros, toma de testimonios a familiares y a vecinos de la zona.
El ministro de Seguridad de la provincia de Santa Fe, Claudio Brilloni, también concurrió al lugar del crimen y declaró: “Es todo muy reciente, tenemos a una mujer que habría recibido un golpe en la cabeza que le produjo su deceso, en circunstancias que todavía no podemos determinar”.
Sobre el resultado del operativo de seguridad del clásico rosarino, el funcionario opinó que el balance “fue muy bueno”, aunque destacó la existencia de incidentes protagonizados por dirigentes de Newell’s y Rosario Central.
“Por ahí, hubo algún que otro hincha, de estos malos hinchas que tenemos en el fútbol argentino, pero por ahora todo se desarrolló con total normalidad”, agregó.
Por su parte, Central publicó un comunicado en su cuenta oficial de las redes sociales en el que sostiene que “el Club Atlético Rosario Central lamenta el fallecimiento de nuestra hincha Ivana Paula Garcilazo Bellón y repudia categóricamente todo acto de violencia”.
En este sentido, Newell’s también se solidarizó con la hincha asesinada y publicó en las redes un comunicado: “El Club Atlético Newell’s Old Boys lamenta el fallecimiento de Ivana Garcilazo Bellón y extiende condolencias a sus familiares. La institución condena enérgicamente cualquier manifestación de violencia”.
El homicidio de Garcilazo coincidió con la circulación de un video en Twitter, donde un hincha de Newell’s amenaza con atacar con una piedra de gran tamaño a los vehículos que festejaran la victoria de Central por la avenida Pellegrini, a unas tres cuadras del lugar del crimen.
En el video, el simpatizante “rojinegro”, de unos 40 años, con un cigarrillo ladeado en la comisura del labio y enfundado en una campera de Newell’s, que camina junto al cantero central de la avenida Pellegrini con una enorme piedra en su mano izquierda, advierte: “¿O no, bolima (sic)? Te lo desarticulo, boludo, eh. Ay, ay, ay; ay, ay, ay, tengo un par de adoquines… te lo desarticulo al primero que pasa tocando una bocinita, boludo, eh”.
El fiscal de la Unidad de Homicidios Dolosos Gastón Ávila, de la Fiscalía Regional Segunda, investiga el video en cuestión, donde además del sindicado posible agresor aparecen al menos otros cuatro hinchas de Newell’s enfundados en ropa del ese club, que recorren la avenida Pellegrini frente al estadio Coloso Marcelo Bielsa, del Parque Independencia, en busca de vehículos con hinchas de Central para atacarlos.
Sin embargo, un vocero judicial explicó que “no es una de las personas aprehendidas por el momento. El video donde se lo ve está en investigación junto a otros que fueron aportados a Fiscalía”.
El clásico rosarino registra otros antecedentes trágicos, como los dos hinchas “canallas” asesinados cuando festejaban el triunfo en octubre de 2014 y el de uno de Newell’s asesinado de un balazo por uno de Central en la previa de un clásico jugado en 1989 en el Gigante de Arroyito, cuando el fútbol argentino tenía visitantes.
En tanto, la noche del lunes 29 de agosto de 2005, varios automovilistas fueron atacados a pedradas en inmediaciones del estadio Coloso Bielsa, luego del clásico que Central le ganó a Newell’s por la Copa Sudamericana.