En el marco de las diferentes actividades tratamentales que se impulsan desde el Servicio Penitenciario Bonaerense, 15 personas privadas de libertad alojadas en la Unidad N° 9 de La Plata aprenden lenguaje de señas.
“El valor de esta actividad reside no solo en la adquisición de una nueva habilidad, sino también en el fomento de valores fundamentales como el respeto y la inclusión” resaltó el subdirector del establecimiento penitenciario, Cristian Marchesi quien luego agregó que “el curso contribuye al desarrollo de actitudes empáticas y comprensivas, esenciales para fortalecer la convivencia”.
La actividad, orientada a que los participantes sean capaces de comunicarse con personas que presenten una discapacidad auditiva, es coordinada por el responsable del Área Educativa de la unidad, Lucas García.
“Es un orgullo para mí poder por tercera ocasión compartir mis conocimientos con muchos de mis compañeros”, resaltó José quien está privado de libertad y es el encargado de dictar el curso que se brinda en el Centro Cultural Pablo Freire que funciona en el establecimiento. “Es emocionante saber que estos saberes ayudan a la inclusión permitiendo a los alumnos ampliar sus horizontes”, subrayó.
Por su parte, Martín, uno de los alumnos contó estar “muy contento y emocionado con esta oportunidad ya que aprender este nuevo lenguaje, puede ayudarnos a estar más integrados con quienes nos rodean”.
El dictado del curso, de dos meses de duración, cuenta con el acompañamiento del director de la Unidad, Pablo Jotayan y demás funcionarios penitenciarios.