Fieles de las comunidades de la diócesis de Quilmes participaron de la 11ª peregrinación brocheriana a pie, una de las manifestaciones populares más importantes de la diócesis.
Las personas iniciaron su peregrinación en la Catedral Inmaculada Concepción (Rivadavia 355, Quilmes Centro) y la finalizaron en la Casa de encuentro “Santo Cura Brochero” (Trenque Lauquen 2551, Bosques), en un recorrido de 17 km.
El Obispo de Quilmes, Carlos Tissera, realizó el saludo inicial y bendijo a los presentes. En su saludo resaltó las figuras de Santo Cura Brochero y de Mama Antula, recientemente canonizada: “él con su mula y ella a pie, descalza, se encargaron de propagar el testimonio de Jesús y difundir los ejercicios espirituales ignacianos para el bien de las personas”. Además, el obispo invitó a los presentes a participar del encuentro festivo diocesano del sábado 16 de marzo en la Casa Cura Brochero, para compartir la alegría de la fiesta de estos santos argentinos. Cerca de las 8 de la mañana, después de las indicaciones del Padre Lucio Carvalho Rodrigues, Vicario General de la Diócesis y Director del predio de Bosques dedicado a Brochero, los caminantes iniciaron su marcha con el lema “Cada uno toca la cuerda con los dedos que Dios le ha dado”.
Esta expresión de fe tuvo su cierre con la Misa que presidieron el Padre Obispo Tissera y el Padre Obispo Eduardo Redondo, quien acompañó la peregrinación a pie desde la Plaza del Mate. Fue muy destacable la labor de los voluntarios servidores que acompañaron toda la peregrinación, junto a los equipos médicos, y el trabajo de los grupos que se organizaron para atender a las personas en los descansos, con agua, frutas, mate cocido, tortas fritas y cuidados sanitarios, entre quienes estaban los veteranos de la Guerra de Malvinas, y quienes animaron con música, baile y otras manifestaciones artísticas a los caminantes.