Tras el descargo que realizó en su Instagram, la Justicia le quitó el celular al futbolista Oscar «Junior» Benítez por postear contra la familia de su ex, Anabeia, luego de ser condenado a cinco años de prisión por violencia y amenazas.
Rodrigo Tripolone, abogado de Juan Carlos Ayala, padre de Anabelia, ex novia de Benítez, y que se quitó la vida el último Año Nuevo, denunció ante el juez del juicio Antonio Balicki el uso de las redes sociales para “amenazar” a sus representados. El llamado de atención formal y la consecuente publicación de los posteos en este medio provocaron que el Servicio Penitenciario Bonaerense le quitara al ex jugador de Boca Juniors y Lanús, entre otros equipos, su teléfono celular.
La abogada defensora de Benítez, María Inés Salomone, le pidió entonces al magistrado que revea la decisión, pero el titular del Juzgado en lo Correccional 8 de Lomas de Zamora le respondió que se trató de una decisión del Servicio Penitenciario.
Si bien desde la pandemia no es ilegal que los internos tengan teléfonos celulares en sus celdas, deben respetar un reglamento que indica, entre otros puntos, que no pueden usar las redes sociales. En el caso de Benítez, además, los posteos fueron, según entendió Tripolone, contra la familia Ayala, que lo tomó como una amenaza y amedrentamiento.
En el primer párrafo de un texto subido como imagen el miércoles pasado, horas después de haber sido condenado, escribió: “Llegó la hora de contar y sacar a la vista de todos la verdad y que puedan ver y sacar cada uno su conclusión ya que la otra parte desde el 2021 hasta el día de hoy se encargó de inventar ensuciar y difamar mi imagen con mentiras y sin ninguna prueba sin más que solo dichos de dichos (SIC)”.
Fue el primero de una seguidilla de nueve posteos que, aparentemente, hizo el propio Benítez desde la Alcaidía de La Plata, donde está detenido desde enero pasado, cuando tras el suicidio de Anabelia la Justicia suspendió su prisión domiciliaria y lo mandó de nuevo tras las rejas.