El ministro de Gobierno bonaerense anunció que desde los ministerios de Salud, Educación, Seguridad, Justicia y el Instituto de Loterías buscarán combatir el auge de las apuestas en los jóvenes de la Provincia. Alberto Sileoni señaló que desde el Gobierno nacional la respuesta es “arréglate”. Hasta el momento hay 90 influencers denunciados.
Las apuestas deportivas ya no necesitan lugares físicos para llevarse a cabo, solo basta con que un chico tenga un celular y dinero en una billetera virtual para jugárselo. Una actividad con un crecimiento exponencial sin antecedentes que nadie sabe donde va a terminar, pero que en la actualidad se lleva puesta la salud mental de adolescentes y jóvenes adultos que encuentran en esta modalidad una forma de ganar una fortuna fácil. Aún más grave, detallan que pueden verse en los recreos a alumnos prestando plata o a algunos experimentados y mayores, que ofician de tomadores de apuestas.
En una nueva conferencia de prensa, Carlos Bianco, Ministro de Gobierno de la Provincia de Buenos Aires, abordó la creciente problemática del juego online entre menores en el territorio bonaerense. Según Bianco, un número significativo de adolescentes está falseando sus datos para acceder a plataformas de juego online, lo que los lleva a situaciones de endeudamiento.
“Detectamos adolescentes que falsean sus datos para entrar en páginas de juegos online y se endeudan”, afirmó el funcionario en su habitual rueda de prensa. La situación se agrava con el hecho de que solamente el 20 por ciento del juego online se realiza en plataformas legales, mientras que el 80 por ciento transcurre en páginas ilegales. Esta realidad ha llevado al gobernador a solicitar la creación de una mesa de trabajo que aborde la problemática desde siete ejes estratégicos.
Entre las medidas anunciadas, Bianco destacó “Vamos a implementar datos biométricos, para que ningún pibe pueda entrar a los sitios de juegos online”, señaló. Además, en las escuelas secundarias se procederá al bloqueo de estas páginas para reforzar la protección de los estudiantes.
La mesa de trabajo convocada por el gobernador se enfocará en la creación y aplicación de políticas integrales que no solo regulen el acceso a los juegos online, sino que también promuevan la educación y concienciación sobre los riesgos asociados con el juego en línea. La iniciativa busca involucrar a diversas entidades gubernamentales, educativas y tecnológicas para abordar el problema de manera multidisciplinaria y eficaz.
Además, señaló “hable con Grindetti (jefe de Gabinete de la Ciudad de Buenos Aires) y establecimos una mesa de trabajo conjunto”.
Por su parte, Gonzalo Atanasof, Presidente de Loterías expresó “estamos denunciando a todos los influencers que promocionan los sitios ilegales de juego online, y ya son más de 90 los influencers que denunciamos para que se caigan esos perfiles”.
Por su parte, el secretario de Cultura y Educación, Alberto Sileoni, se refirió a la “invitación constante” que implica para los más jóvenes el ingreso a las apuestas online por parte de las grandes competencias deportivas y apuntó al fútbol.
“Por supuesto que es importante marcar la distinción entre juego legal e ilegal, pero debemos marcar también cierto cinismo cuando en la Copa América y en la Eurocopa, y en las camisetas de los grandes equipos argentinos y de la Selección nacional tienen publicidades sobre sitios de juego, lo que significa una invitación constante al juego para los jóvenes”, indicó.
Además, el ministro de Seguridad bonaerense, Javier Alonso, se refirió a la necesidad de que el Banco Central establezca un sistema de control parental sobre las transferencias que hacen los menores y que la Unidad de Información Financiera (UIF) trabaje en estrategias de seguimiento de los flujos financieros sobre quienes integran la red de juego ilegal, al tiempo que pidió mayores controles sobre el uso de billeteras virtuales entre los más chicos.
Asimismo, dijo que la mayoría de los jóvenes que generan un vínculo de dependencia con el juego se endeudan y quedan más expuestos a la posibilidad de cometer otros delitos para poder pagarlas.