La Cámara alta de la provincia de Buenos Aires le dio media sanción a un proyecto que establece la obligatoriedad de realizar trabajos comunitarios como sanción para quienes cometan infracciones de tránsito. La iniciativa fue presentada por el senador del bloque UCR + Cambio Federal, Ariel Bordaisco, y ahora deberá ser tratada por la Cámara de Diputados bonaerense.
“Las infracciones de tránsito no son solamente números o estadísticas, son una vida rota, una familia destruida, una comunidad dolida. Por eso proponemos una pena que también permita que el infractor recapacite”, sostuvo el senador oriundo de Mar del Plata y enfatizó que el trabajo comunitario puede reducir los niveles de reincidencia y promover la rehabilitación.
La propuesta legislativa busca modificar el artículo 39 bis de la Ley 13.927 de Tránsito, al incorporar el trabajo comunitario como una sanción complementaria o alternativa a las tradicionales multas económicas y a la inhabilitación para conducir. El proyecto prevé que los infractores cumplan entre 2 y 20 horas de tareas, en horarios que no interfieran con sus actividades laborales o educativas.
El texto aprobado contempla que los jueces de faltas serán los encargados de determinar el tipo de tareas, el lugar y la duración de la sanción, teniendo en cuenta las características del hecho, los antecedentes del infractor y los posibles efectos reparadores. Las tareas deberán realizarse en instituciones de bien público o en organismos estatales de los municipios o la Provincia.
En los casos más graves, cuando la infracción haya puesto en riesgo la vida o la salud de terceros, el proyecto establece que el trabajo comunitario se deberá cumplir en centros de rehabilitación psicofísica para víctimas de siniestros viales. La intención es que los infractores tomen conciencia directa del impacto de su conducta.
La sanción de trabajo comunitario también podrá ser solicitada por la persona acusada al momento de su notificación o en audiencia, y su otorgamiento quedará a criterio del juez. El incumplimiento de la medida cuadruplicará el monto de la multa correspondiente, según estipula el articulado de la norma.
Desde el entorno del senador radical indicaron que la propuesta busca generar una política pública de prevención, rehabilitación y conciencia vial. “El castigo económico muchas veces no logra el efecto deseado. Necesitamos sanciones que impliquen un aprendizaje concreto y que sirvan también para reparar el daño causado”, explicó Bordaisco.
La propuesta se inspira en la experiencia de otras provincias como Mendoza, en la que este tipo de medidas ya se encuentran vigentes, y responde a una demanda social creciente por mejorar la seguridad vial y disminuir la siniestralidad en rutas y calles bonaerenses. “Queremos que el infractor conecte con su error, colabore con la comunidad y aprenda de sus consecuencias”, concluyó el legislador radical.
Trabajo comunitario: una sanción con efecto educativo
La iniciativa establece que el trabajo comunitario consistirá en tareas no remuneradas en actividades de interés social, educativo o de utilidad pública. Los jueces podrán determinar su aplicación de oficio o a pedido del infractor, siempre que se evalúe que puede generar un cambio de conducta y conciencia sobre las normas de tránsito.
La Cámara alta le dio media sanción a un proyecto, de Ariel Bordaisco, que establece trabajos comunitarios como sanción por infracciones de tránsito.
Además, el proyecto contempla que el cumplimiento de las horas de trabajo comunitario pueda redimir días de la sanción de inhabilitación para conducir. De esta manera, se promueve una lógica restaurativa, que combine castigo con posibilidad de reinserción.
La autoridad de aplicación deberá coordinar con los municipios la implementación, fiscalización y ejecución de las sanciones, mediante convenios que aseguren la asignación de tareas útiles y acordes a los fines pedagógicos de la norma. Varios distritos bonaerenses ya aplican este tipo de medidas por ordenanza.
Por último, Bordaisco destacó que “el objetivo no es castigar por castigar, sino lograr una transformación real en la actitud del conductor. Estas sanciones tienen valor educativo, social y humano”. De obtener sanción definitiva, la norma incorporaría una herramienta inédita en el Código de Tránsito provincial.
