La historia de José Antonio Cáceres, un exoficial de la Policía Bonaerense, se ha convertido en un símbolo de la lucha contra las sentencias judiciales cuestionadas. Su hijo, Agustín (22), lleva más de seis años buscando visibilizar el caso de su padre, quien cumple una condena a prisión perpetua por un delito que, según la familia y documentos oficiales, no cometió. La familia sostiene que la detención responde a una “causa armada” influenciada por presiones externas.
El Operativo en Berisso y el Fatal Desenlace
El caso se remonta al 21 de octubre de 2011, en Berisso. Un operativo policial que involucraba a seis efectivos y tres patrulleros terminó con la aprehensión de un menor de edad por una motocicleta presuntamente robada, y la detención de Néstor Ariel Canizzo, propietario de la vivienda, quien tenía un pedido de captura activo.
Cáceres, junto a su compañero Conti, fue uno de los agentes involucrados. Tras el procedimiento, Canizzo fue alojado en la Comisaría Cuarta, donde compartió calabozo con otro detenido, Víctor Raúl Elguera Villegas.

Según el testimonio de Elguera Villegas, durante la noche Canizzo comenzó a mostrar signos de malestar, con quejas, tos, sangre y dificultades para respirar. A pesar de recibir dos pastillas de Buscapina que le acercó su hermano, su estado empeoró. El testigo relató que, cerca de la medianoche, Canizzo cayó al suelo del calabozo y dejó de responder. Los médicos que llegaron al lugar constataron su fallecimiento.
La Batalla de las Pruebas
El núcleo de la controversia judicial reside en los informes forenses:
- Autopsia Oficial: Realizada por peritos forenses judiciales, determinó que la muerte de Néstor Ariel Canizzo fue causada por una insuficiencia cardíaca congestiva, agravada por el consumo de drogas. El informe no detectó golpes, lucha ni violencia.
- Pericia Contradictoria: Años después, una pericia fotográfica presentada por una asociación de derechos humanos de La Plata fue considerada por el tribunal. Agustín Cáceres denunció que este informe fue realizado “sin ver el cuerpo, solo a partir de imágenes tomadas en una autopista”.
- Perito de Parte: Un informe posterior del Dr. Omar Alejandro Ledesma, perito de parte, contradijo la autopsia oficial al observar una lesión en la glotis que correspondería a un mecanismo por compresión o trauma, sugiriendo la omisión de una “lesión de relevancia cardinal” en el informe inicial.
Condena y Denuncia de Injusticia
El juicio, llevado a cabo entre marzo y abril de 2019, culminó con un veredicto condenatorio a prisión perpetua por homicidio calificado para los cuatro imputados, incluido José Antonio Cáceres, al considerarlos responsables de la muerte de Canizzo en el ejercicio de sus funciones.
Sin embargo, Agustín Cáceres destaca una incongruencia clave: “Los tres compañeros de mi papá, imputados en la misma causa, ya están libres. Él es el único que sigue preso. ¿Por qué? ¿Qué hay detrás?”.
La familia sostiene que la condena se fundamentó en presiones externas, ignorando las pruebas más sólidas. Agustín continúa su lucha pública con el objetivo de visibilizar el caso de su padre, afirmando contar con toda la documentación que probaría la inocencia del exoficial.