Entre expedientes, audiencias y años de trabajo silencioso, el juez del Tribunal en lo Criminal N° 2 de Florencio Varela Fabio Stremel se despide, tras casi treinta y nueve años de trayectoria judicial. Su carrera culmina con la satisfacción de haber sido parte de la historia institucional de Florencio Varela.
Nacido en Bahía Blanca, inició su camino en el Poder Judicial a comienzos de los años ochenta. Estudió en la Universidad Nacional de La Plata, donde obtuvo el título de abogado, y más tarde se especializó en Derecho Penal y Criminología en la Universidad del Salvador. Durante su extensa trayectoria, desempeñó funciones en distintas defensorías oficiales y juzgados penales de la provincia.
En 2019, Stremel fue designado como uno de los tres primeros magistrados del Tribunal en lo Criminal N° 2 de Florencio Varela, junto a Natalia González Aguirre y Santiago Zurolo Suárez, organismo que comenzó a funcionar en el marco del proceso de descentralización de la justicia bonaerense.


“Fue un honor formar parte de la historia judicial del distrito y contribuir al fortalecimiento del acceso a la justicia”, señala Stremel.
Durante su gestión, el tribunal abordó causas de alto impacto social, como el caso de la menor atacada en San Francisco Solano, la condena de 30 años a un abusador intrafamiliar y diversos hechos de homicidio y abuso que marcaron precedentes en la jurisprudencia.
El magistrado destaca la labor de los equipos técnicos y administrativos que integran el tribunal: “este es un trabajo colectivo. Cada resolución judicial es el resultado del compromiso de muchas personas que creen en la función pública y en el valor de la justicia.”
También subraya la importancia de la oralidad y la comunicación clara con la comunidad: “Los jueces debemos dar razones de nuestros fallos y explicarlos de manera sencilla. La oralidad fortalece la transparencia y acerca la justicia a la ciudadanía.”
Antes de su retiro, Fabio Stremel ha retomado la docencia universitaria, ámbito al que proyecta dedicarse junto a la escritura y la formación de futuros profesionales del derecho.
Con emoción, uno de los primeros jueces del TOC 2, deja un mensaje para la comunidad varelense: “Le dejo a Florencio Varela mucho trabajo, muchas horas, y todo mi compromiso. Y me llevo el orgullo de haber formado parte de su historia. Este lugar tiene un pedacito de mi corazón, y yo espero haber dejado una huella de esfuerzo y honestidad.”


Cuando se le pregunta cómo le gustaría ser recordado, no duda en responder con humildad y convicción: “Me gustaría que me recuerden como un trabajador más de la justicia. Como alguien que cumplió su deber con honestidad, sin soberbia, con la puerta siempre abierta y la conciencia tranquila. Que sepan que en esta casa, donde antes se cocinaba pan, hoy se cocinó justicia con esfuerzo, con corazón y con la gente adentro.”
Por Romina Martínez Parfeniuk
