Autos, motos, micros y bicicleteas se hicieron presente ayer en una de las manifestaciones populares de fe más importantes de la Diócesis de Quilmes: la peregrinación brocheriana desde la Iglesia Catedral Inmaculada Concepción hasta el predio “Santo Cura Brochero”. “Dios es fiel y sostiene nuestra fidelidad” fue el lema que aminó esta 9° edición.
El Obispo de Quilmes, Carlos José Tissera, inició la jornada con la bendición a los peregrinos y el recuerdo por el 9º aniversario del Pontificado de Francisco. Además, invitó a rezar por la paz, para que culminé la guerra en Europa y los distintos conflictos bélicos que hay en el mundo, por sus víctimas, y por todas las personas que sufren situaciones de violencia e injusticia.
La mañana templada y el cielo despejado fue un marco ideal para esta peregrinación. En el trayecto de 17 km hubo tres paradas “para recibir la bendición del Cura Brochero”: la “Posada Novak”, en el Parque de la Ciudad Jorge Novak (Av. Smith y Vicente López, Quilmes), frente a la Parroquia San Jorge; la “Posada Socorro”, en la parroquia Nuestra Señora del Perpetuo Socorro (Calchaquí 4949, Quilmes Oeste); y la “Posada El Mate” en la Plaza del Mate (Ruta 36 y Thevenet, Florencio Varela).
Fue muy importante el trabajo del personal de tránsito de los municipios de Quilmes, Berazategui y Florencio Varela, de los voluntarios y las personas de las comunidades que organizaron las posadas y el recibimiento a peregrinos. Pasado el mediodía la fiesta de fe tuvo su cierre con la misa que presidió el Padre Obispo Tissera con la participación de sacerdotes, diáconos, peregrinas y peregrinos, y pueblo de la Diócesis de Quilmes.