Familiares de Leonardo Javier Ponce marcharon a la Comisaría Quilmes Séptima de Bernal Oeste (ubicada en calle 172 y Pampa) para reclamar el esclarecimiento de su muerte, ocurrida el domingo en una de las celdas de la dependencia. Las autoridades sostienen que se trató de un suicidio, pero su madre duda de dicha versión.
Ponce fue detenido pasadas las 19 horas del sábado cuando, junto a un cómplice que logró darse a la fuga, intentó asaltar un colectivo en inmediaciones de la villa Iapi. A bordo del transporte público iba un oficial de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires, quien frustró el robo y redujo al ladrón. Desde allí trasladaron a Ponce hasta el asiento de la Seccional Séptima, para ponerlo a disposición de la Justicia.
También arriba del colectivo viajaba un vecino del aprehendido, quien al reconocerlo de inmediato le avisó a su pareja sobre lo sucedido. La mujer acudió a la Comisaría con el documento del imputado, para acelerar el proceso de identificación y que pudiera recuperar la libertad cuanto antes.
Sin embargo, en ese interín Ponce fue hallado muerto en su celda, supuestamente ahorcado con su propio buzo. La madre del fallecido aseguró que a su nuera, que es analfabeta, “le hicieron firmar una declaración que ella no sabe de qué se trata y hasta ese momento le decían que su marido estaba vivo”.
Asimismo, detallaron que el presunto suicidio se dio a cinco minutos apenas de haberlo alojado en una celda aislada de los demás detenidos. “Cuando el imaginaria lo vio automáticamente se le hizo RCP con un testigo, por protocolo, se llamó a la ambulancia, pero ya estaba óbito. Se lo llevó a la morgue de Lomas de Zamora para que se realice la autopsia en una jurisdicción diferente y que la misma sea cristalina”, agregó la fuente.
Por otra parte, revelaron que Ponce tenía otra causa penal por la que en los próximos días esperaba afrontar un juicio oral en el que podía ser condenado y que él aseguraba que “preso no iba a estar nunca más”. Además indicaron que las lesiones que presentaba el detenido en la cabeza se debían a un robo del que él había sido víctima en horas de la mañana en zona de Monte Chingolo, partido de Lanús, donde lo golpearon para robarle una moto y un carro.
Sin embargo, la familia sostiene que se trata de una “muerte dudosa” y realizó una marcha para pedir el esclarecimiento de lo sucedido. En los hechos intervino el fiscal Jorge Saizar, titular de la UFI N° 5 del Departamento Judicial Quilmes.