A 5 años de ocurrido el crimen del agente de la Policía Local José Zurita a metros de la estación de Ezpeleta, el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) Nº4 de Quilmes, conformado por los jueces Alberto Elio Ojeda, Andrea Vanina Calaza y Pablo Pérez Marcote comenzó a juzgar a Cristian Agustín Flores Michel y a Carlos Alberto Sánchez Sandoval por el hecho. En la primer audiencia se escucharon seis testigos que dieron cuenta lo sucedido la noche del 9 de abril de 2017.
El fiscal del juicio, Claudio Pelayo, presentó su acusación y aseguró que en el marco del debate intentará demostrar la participación de los encartados en el crimen de Zurita. Asimismo, calificó el hecho cómo “homicidio doblemente calificado, agravado por alevosía y por haber atacado a un integrante de las fuerzas de seguridad”, tipificados en los artículos 54,80 inciso 2 y 8 del Código Penal.
A su turno, el defensor de Flores Michel remarcó que irá por la “inocencia” de su asistido. Y en el caso de la defensa del remisero Sánchez Sandoval argumentó que su ahijado procesal “no sabía que las dos personas que llevaba en su auto iban armada y que iban a matar”.
Testigos
En la primer audiencia declararon seis personas, cuatro que estuvieron en inmediaciones de donde fue atacado Zurita y dos relacionados con uno de los imputados. La primera en declarar fue una mujer que, aquella tarde noche escuchó y vio un auto en inmediaciones de su casa. Aseguró que le pareció sospechosa la llegada del auto y que dos masculinos ingresaran rápidamente al mismo y salieran “chiflando”. ” Las ruedas del auto hicieron un chiflido cuando salieron…atiné a tomar nota de la patente y cuando más tarde vi pasar a unos policías mirando, consulte lo que había visto y les di el papel con los datos”.
Esta testigo es la que coloca al automóvil en el que se movilizaban los delincuentes a cuadras del Supermercado Día dónde cayó sin vida el Policía Zurita. También declararon dos agentes del CPC Quilmes que fueron alertados de disparos de San Martín en inmediaciones a la estación de Trenes de Ezpeleta. Los agentes de la ley fueron los primeros que llegaron al lugar y vieron ya sin vida a Zurita. Una de las policías pidió justicia por su compañero y lo recordó al aseverar “al muchacho lo veíamos cuando hacíamos las recorridas en Ezpeleta. Él estaba de custodia en una Salita” .
También, se expresó pero su relato sirvió para hablar de que sucedió antes de que el numerario de la Local fuera encontrado sin vida en el supermercado. El cajero del centro comercial relató que sintió disparos en el ventanal del supermercado y que hizo que todos -clientes y empleados – se resguardarse en el fondo, dentro de las cámaras de frío del local y que al salir encontraron a Zurita en el piso herido de bala. Llamamos a la ambulancia” sentenció.
En otro tramo de los testimonios de la primera audiencia del juicio , prestaron su testimonio dos mujeres, que se refirieron a uno de lo encartados. Una fue la propietaria de la casa donde alquila el padre del remisero Sánchez Sandoval, quien lo sindicó como haberlo visto el día de los hechos limpiando el auto del padre e interactuó con él por el volúmen de la música. También, se quejó del procedimiento de allanamiento de la madrugada del 10 de abril de 2017 remarcando que le rompieron “todo” . “La policía me rompió todo y lastimó a mi hijo cuando allanaron el terreno donde está mí casa y la que yo le alquilo al padre de Sánchez Sandoval”.
Por último, se le tomó testimonio a una vecina de Sourigues que había sido la propietaria del auto que se utilizó en el ataque al policía. La mujer refirió que ella había puesto un aviso en el diario para vender un auto y que un sábado vio al padre del encartado, que había ido a comprar el rodado. Aclaró que le abonaron en el momento y que se lo llevaron.
“Vino la policía una madrugada preguntándome si era la dueña de tal auto y les dije que lo había vendido hacía unas semanas. Mostré todos los papeles… Recuerdo que el que me lo compró dijo que era un regalo para su hijo”.
Las audiencias continuarán mañana con la declaración de peritos de diversas especialidades y los testigos que presenten las defensas de los acusados .
El hecho
El domingo 9 de abril de 2017, José Zurita (27 años), estaba uniformado esperando el colectivo en la avenida San Martín y Chile (a metros de la estación del tren de Ezpeleta) para ir a su trabajo en la Policía Local de Quilmes. Fue atacado a balazos con fines de robo y murió por las heridas causadas.