En una serie de allanamientos, la Justicia penal de La Plata detuvo anoche a un médico y a cinco personas más, acusados de formar parte de una banda que expedía certificados apócrifos para solicitar licencias a auxiliares de escuelas de Lanús, informaron fuentes de la investigación.
“Esto es el fruto de un trabajo de seis mes de investigación interna, en los cuales pudimos comprobar fehacientemente que el médico vendía los certificados”, explicó a este portal el subsecretario de Recursos Humanos del ministerio de Educación bonaerense, Ignacio Sanguinetti.
El profesional de la salud capturado es Rubén Darío Massobrio (72), a quien se le imputa el delito de “defraudación contra la administración pública en concurso ideal con falsificación de documento”.
Además de Massobrio, se detuvo a Norberto Manuel Toledo Mazzei (25) ex empleado de la farmacia Uomax; a los auxiliares docentes José Humberto Poustis (55); Walter Fernando Romero (34); Mónica Elizabeth Ruíz (37) y Marta Lorena Monroy (37).
Las pesquisas apuntan también a una delegada del gremio UCPN y a otros dirigentes sindicales como cómplices y facilitadores. La mujer figuraba como “Amalia UPCN” en los papeles encontrados.
En tanto, fuentes judiciales confirmaron a la agencia Télam fueron ocho los allanamientos realizados: siete en Lanús y uno en Lomas de Zamora. En los operativos se secuestraron, además, seis celulares, certificados médicos, recetarios médicos, dos cuadernos con anotaciones y ocho sellos médicos.
Según explicó Sanguinetti, el expediente se generó a partir de una denuncia anónima en la Oficina de Fortalecimiento Institucional del Ministerio de Justicia. La OFI le dio aviso a la cartera educativa, que la fue la encargada de recopilar el corpus probatario.
“Esta denuncia la hizo la OFI con información que le aportamos nosotros cuando detectamos que Massobrio había otorgado certificados por más de la media”, contó Sanguinetti. La licencias conseguidas eran generalmente eran extensas, lo que obligada al Estado a convocar a un suplente.
Sanguinetti, explicó que “este médico directamente vendía los certificados” y relató que “distintos auxiliares -peones de cocina y porteros- contaron que les vendía cada certificado trucho a 800 o 1000 pesos”. Otros médicos directamente sufrieron la falsificación de su nombre
La OFI además tiene otra denuncia presentada y Educación, siete, y algunas de ellas también terminaron con detenciones y procesamientos. En esas causas, hay 576 agentes docentes o auxiliares involucrados y una estada calculada en 11 millones de pesos.
Según Sanguinetti, cuando comenzó la gestión de Cambiemos había 82.000 auxiliares, de los cuales 24.000 eran suplentes, o sea que había 24.000 de licencia; y hoy hay 8.000 suplentes y 62.000 titulares.
Fuente: AN Digital