Twitter lanzó ayer la iniciativa #HayAyuda, que brindará a cualquier persona que esté pasando, directa o indirectamente, por una situación de explotación sexual infantil (o grooming) una notificación directa con la Línea Nacional 137.
A través de un botón en la aplicación se podrá iniciar una consulta para recibir contención, información y asesoramiento profesional para prevenir el delito y/o radicar la denuncia, según corresponda.
La herramienta es resultado de un trabajo en conjunto del Instituto de Políticas Públicas de Prevención de Grooming de la Cámara de Diputados de la provincia de Buenos Aires, la ONG Mamá en Línea, y el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos.
“Twitter tiene cero tolerancia hacia la explotación sexual infantil”, señaló Danya Centeno, gerenta de Políticas Públicas para Twitter en mercados hispanohablantes. Fue durante una entrevista con Télam de la que también participaron referentes de todas las instituciones involucradas en la iniciativa.
El botón podrá activarlo cualquier persona que esté pasando -directa o indirectamente- por una situación de explotación sexual, representación de menores en actos sexuales o sexualización de menores: sea el/la niña, niño o adolescente, o su mamá/papá, un docente o cualquier referente de la víctima, explicó la directiva.
Para acceder habrá que ingresar en el área de búsqueda de Twitter palabras y términos comúnmente utilizados sobre este tema, tales como: “dónde denunciar abuso sexual infantil”, “acoso sexual de niños en redes sociales”, “ayuda a víctimas de abuso sexual infantil”.
Al momento de colocar esas palabras en el buscador, aparece el anuncio y con un simple clic se conecta directamente con la línea de ayuda. En la notificación se ofrece:
– Información clara sobre las características del delito, los perpetradores y las víctimas.
– Pautas para abordar el tema con niños, niñas y adolescentes.
– Asesoramiento sobre el uso responsable de las tecnologías de la información y comunicación.
– El recurso de la Línea Nacional 137, que funciona ininterrumpidamente las 24 horas, los 365 días del año, para consultas y pedidos de ayuda.
“Es la primera activación que hacemos en materia de explotación sexual infantil en la región”, remarcó Centeno. También mencionó que en México, la red social llevó adelante una iniciativa similar sobre la violencia doméstica.
“En cada paso que damos salvamos vidas”, remarcó a Télam Roxana Domínguez, presidenta de la ONG Mamá en Línea.
A su lado se encontraba su hija Ayelén, que en 2009 fue víctima de grooming. El grooming es un delito y se da cuando un adulto acosa sexualmente a una niña, niño o adolescente a través de un medio digital. Además, a través de una serie de estrategias, el adulto busca garantizar que la víctima no revele la situación abusiva.
“En las mismas redes donde ponemos un like en una foto, hay distribución de material de abuso infantil”, alertó Domínguez. Por eso su lucha es día a día, y en articulación con todos los sectores que conforman la sociedad porque es fundamental “para combatir la explotación sexual infantil en línea y proteger a los niños, niñas y adolescentes en la era digital”, continuó.
“Después de tantas lágrimas y todo lo que dolió, celebro enormemente esta predisposición de Twitter”, destacó Rodríguez, que hoy le toca vivir este momento como directora del Instituto de Políticas Públicas de prevención de Grooming de la Cámara de Diputados de la provincia de Buenos Aires. Institución que, remarcó, impulsó la Ley 26.904 del Código Penal, que tipificó el delito del Grooming en la Argentina.
En este camino también destacó la Ley 27.590 “Mica Ortega”, creada en 2020 por el gobierno nacional para informar y prevenir acerca del grooming. El nombre de la iniciativa es en homenaje a Micaela Ortega, la nena de 12 años oriunda de Bahía Blanca que en 2016 fue asesinada por Jonathan Luna. El hombre la contactó a través de Facebook, fingiendo ser menor de edad. Luna fue condenado a cadena perpetua.
Las consultas a la línea 137, que existe desde el año 2006, “explotaron durante la pandemia”, dijo a Télam Carina Rago, asesora General del Programa Las Víctimas Contra Las Violencias.
En 2020 se recibieron 562 consultas sobre casos de grooming, lo que representó un aumento del 126% respecto del año anterior, en que se habían recibido 249. La tendencia se mantiene desde entonces: en 2021 se atendieron 587 casos, y van 227 entre enero a julio del año en curso, de acuerdo con los datos del “Equipo Niñ@s Contra la Explotación Sexual y Grooming”.
Rago remarcó que es importante hablar de números porque todavía falta mucho por hacer, y eso tiene que ver con trabajar en cuanto a lo preventivo. “En Argentina tenemos una Ley de Educación Sexual Integral por la que todavía falta mucho por trabajar y fortalecer”.
“Muchas de las consultas y llamados son preventivos: mamás, papás, docentes, adultos, que están alertas frente al riesgo que corren los niños y niñas en el uso de las redes. En el peor de los casos termina siendo una victimización sexual o femicidio”, explicó.
Por eso, remarcó que es fundamental la disponibilidad de profesionales que puedan acompañar y asesorar a esas personas. “Es muy importante tener un registro, sin entrar en la intimidad de los adolescentes y niños. Se trata de asesorarlos y darles toda la información que necesitan, para saber lo riesgoso que es estar en las redes que manejan y la facilidad con que se tergiversa la información y un adulto se hacer pasar por un par”, reflexionó.
La iniciativa implica visibiliza un recurso, como es la línea 137, donde las personas siempre van a tener una respuesta y van a tener una contención: “Muchas mamás llaman en estado de desesperación, porque en las redes hay fotos de sus hijas o seres queridos y no se pueden controlar”.
La línea 137 no solo brinda asesoramiento, contención y seguimiento de casos, sino también la intervención de la justicia en los casos que corresponda. “También se pueden hacer intervenciones en territorio, si se nos pide alguna puntual se puede viajar a la provincia que lo requiera para poder acompañar esa denuncia, fortalecer a esa mamá o ese papá, que está sola/ y que el acompañamiento sea real”, destacó.
Los profesionales que integran la Línea 137 lo que hacen es una escucha activa: “Sabemos que las mamás y los papás nos escuchan con un sentimiento de culpa o de impotencia porque no pudieron estar ahí para sus hijos, se sienten culpables”, señaló Rosa Torres, que participa en ese equipo.
“Entonces tratamos de llevarles esa tranquilidad, de que estamos en un proceso de aprendizaje, acá estamos aprendiendo juntos con nuestros hijos a transitar ese otro mundo que no es el físico”.
La especialista aconsejó tratar de tener un acercamiento con los chicos de la misma forma en que se hace en el mundo físico, saber quiénes son sus amigos o adónde van: “Pero sin tener un mensaje punitivo sobre esto, la mejor atención es es el acompañamiento y la escucha activa, el estar allí y que nuestros hijos sepan que siempre estamos para cuidarlos desde el amor y el respeto”.