El atacante de Franco Almirón, el colectivero de la línea 500, que sufrió fractura de cráneo tras ser agredido brutalmente por un sujeto que fue detenido en las últimas horas fue indagado el sábado por el fiscal Hernán Bustos Rivas. Jonatan Romero declaró y reconoció que fue el autor de la golpiza, por lo que seguirá detenido.
Durante el fin de semana, policías de la DDI Quilmes cumplieron la orden del Juez de Garantías de Florencio Varela, Diego Agüero, y detuvieron al agresor del colectivero de la línea 500, Franco Almirón.
Se lo acusa por el delito de “lesiones graves”, puesto que dejó a su víctima al borde de la muerte. El ahora detenido es acusado de golpear por sorpresa y sobre seguro al chofer, al que dejó inconsciente sobre el asfalto, luego de nockearlo y patearle la cabeza en el piso. El violento suceso tuvo lugar como consecuencia de un accidente de tránsito cerca del Hospital Mi Pueblo.
Luego de varias estrategias procesales de su defensor particular, la Cámara de Quilmes confirmó el fallo que denegaba la eximición de prisión. El juez Agüero, en su fallo firmado el viernes, razonó que “una persona que participa de un accidente, se retira del lugar y vuelve, tiene tiempo de contener su furia”.
Ese día, luego del accidente el encartado llevó a su mujer al hospital, ya que se encontraba en trabajo de parto, y regresó. Aprovechando que al colectivero le estaba pasando los datos al hermano del acusado, el agresor desde atrás comenzó a golpearlo con sus puños y cuando el chofer cayó al piso indefenso, culminó su furia pegándole patadas en la cabeza hasta dejarlo inconsciente.
Franco Almirón sufrió fractura de cráneo con derrames internos y no perdió la vida gracias a la intervención médica.
El sábado al ser indagado reconoció el ataque ante el fiscal Bustos Rivas y es complicada su situación procesal.