La Universidad Nacional de La Plata (UNLP) y la Asociación Abuelas de Plaza de Mayo dictarán clases sobre la lucha de ese organismo y sobre la defensa de los derechos humanos en una ex comisaría de La Plata que funcionó como centro clandestino de detención durante la última dictadura militar y que actualmente es un Espacio de Memoria.
Así lo prevé el convenio de cooperación cultural, educacional y científica que se firmará mañana a las 11 en el “Espacio de la Memoria Ex Comisaría 5ta”, ubicada en la diagonal 74 número 2833, entre 23 y 24 de la capital provincial.
El acuerdo será firmado por el decano de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de la UNLP, Miguel Berri, y la titular de Abuelas, Estela Barnes de Carlotto.
En el marco del convenio se dictarán actividades como un circuito de clases en relación con la temática Memoria, Verdad y Justicia, abordado desde diversas materias de la unidad académica; proyectos de carácter académico, científico y cultural, relacionados con la defensa de los derechos fundamentales de las personas y sus garantías; intercambio de información, documentación técnica y bibliográfica de mutuo interés.
También se desarrollarán tareas de investigación, informes de incumbencias de los institutos o áreas respectivas, trabajos de campo, de transferencia de conocimientos y asesorías en temas específicos, que resulten de interés para ambas instituciones.
El edificio funciona en su totalidad como Espacio de Memoria, ya que el año pasado se trasladaron las funciones policiales de la seccional a un nuevo edificio.
Según se determinó en los juicios a los represores del Circuito Camps, en esa dependencia policial estuvieron detenidas de manera ilegal unas 200 personas, entre ellas 10 mujeres embarazadas, muchas de las cuales dieron luz allí y varios niños que eran secuestrados con sus padres.
Una de las embarazadas que estuvo cautiva fue Inés Beatriz Ortega, quien a los 17 años dio luz a su hijo, atada de pies y manos, bebé que fue apropiado y recién a los 27 años recuperaró su identidad. Se trata del nieto recuperado, Leonardo Fossatti.
Fuente: El Teclado